Juan

Guaidó admite “ingenuidad” en su estrategia contra Maduro

El dirigente opositor venezolano reflexiona sobre los errores del pasado y expresa su deseo de regresar a Venezuela.

En una reciente entrevista, Juan Guaidó, reconocido como presidente interino de Venezuela por cerca de 60 países hasta diciembre pasado, admitió que hubo «ingenuidad» y errores no calculados en su estrategia para desalojar a Nicolás Maduro del poder.

Durante el diálogo con el programa Los Informantes de Caracol TV, Guaidó confesó: “Puede ser que haya habido algo de ingenuidad”, añadiendo que cometieron “más errores de lo que no hicimos o de lo que no ejecutamos más rápido” en su enfrentamiento con el régimen de Maduro. Recordó cómo, en enero de 2019, logró unificar las fuerzas antichavistas bajo una causa común, aunque reconoció que no pudo ganar el apoyo de los trabajadores públicos ni de los altos mandos militares, firmemente leales a Maduro.

Actualmente residiendo en Miami, a donde huyó desde Venezuela, Guaidó compartió su anhelo de regresar a su país natal. “Yo estoy hoy en este país no porque quiero, sino porque me expulsaron”, dijo, refiriéndose a su estancia forzada en Estados Unidos junto a su familia. Manifestó su esperanza de volver “muy pronto”, pero enfatizó que solo lo hará cuando pueda garantizar su seguridad.

“No le voy a regalar un rehén más a Maduro, no voy a permitir que secuestren mi voz que representa parte de la lucha de estos años en Venezuela”, expresó firmemente, mostrando su determinación de no comprometer su labor de oposición por regresar precipitadamente.

A pesar de los desafíos que ha enfrentado, Guaidó aún se ve a sí mismo como una figura vital en el paisaje político de Venezuela. “Siento que tengo mucho que aportar, pero más que un cargo, quiero volver, quiero regresar a un país en democracia”, afirmó, rechazando la idea de buscar un puesto público específico y subrayando su deseo de contribuir a la restauración de la democracia en Venezuela.

Al reflexionar sobre los riesgos de su posible retorno, Guaidó destacó el arresto o exilio forzado de al menos 26 miembros de su equipo, mostrando la severidad del régimen de Maduro. Ante este escenario, concluyó que cualquier especulación sobre lo que podría suceder si regresa a Venezuela “puede quedarse corto”, una admisión sombría del peligro real que enfrentaría.