El crack del Inter Miami se da un baño de lujo y confort con su nueva propiedad.
Lionel Messi no suele ser de extravagancias, pero su más reciente inversión inmobiliaria puede ser la excepción. El legendario jugador argentino se ha apropiado de un pedacito del paraíso de Fort Lauderdale, desembolsando nada menos que 10,8 millones de dólares por una mansión que destila lujo por cada uno de sus poros.
Un refugio de Lujo
En una movida que proclama alto y claro que Messi ha llegado para quedarse en el mundo del fútbol estadounidense, el as de Inter Miami se ha hecho con una mansión que se encuentra justo frente al mar en la urbanización Bay Colony, un reducto de lujo en el norte de Miami.
No es simplemente una casa, es casi una pequeña villa que se extiende sobre 0,4 acres de terreno. Los detalles son lo que verdaderamente hace a esta casa una joya: dos muelles privados de 51 metros, una piscina que parece fundirse con el mar, un gimnasio diseñado para el bienestar y un spa que promete ser el mejor lugar para desconectar tras los partidos en la MLS.
La joya de la corona de esta propiedad es, sin duda, la suite principal que ocupará el matrimonio Messi-Roccuzzo. Con unos descomunales 149 metros cuadrados, este espacio promete ser un verdadero santuario de descanso y placer.
Una jugada estratégica
La proximidad con el estadio Drive Pink y las instalaciones de entrenamiento del Inter Miami, situados a unos 8 kilómetros de distancia, habría jugado un papel crucial en la decisión de comprar esta casa. Es una jugada estratégica que permite a Messi estar cerca del pulso del equipo y su campo de juego.
La mansión, que tiene su origen en 1988 y fue renovada en el año 2000, promete ser el nuevo cuartel general de Messi en su conquista de la MLS, siendo adquirida a través de una compañía encabezada por Alfonso Nebot, el administrador patrimonial del jugador.
Sergio Busquets sigue el camino
Siguiendo una ruta similar, Sergio Busquets, ex compañero de equipo de Messi en el Barcelona y ahora colega en el Inter Miami, ha invertido en una mansión en la exclusiva zona de Sea Ranch Lakes. Con una etiqueta de precio de 8,7 millones de dólares, Busquets parece estar asentándose cómodamente en su nuevo hogar lejos de casa, en una vivienda que cuenta con siete habitaciones, seis baños y un garaje para tres autos.
Es evidente que Messi y Busquets están aquí para escribir una nueva página en la historia del fútbol estadounidense, y están haciéndolo con un estilo que solo ellos pueden ostentar. Con estas nuevas adquisiciones, se posicionan como vecinos no solo en el campo, sino también en una de las zonas más exclusivas de Florida, brindando una declaración inconfundible de su estatus y su compromiso con el futuro del Inter Miami.