En un capítulo más de los escándalos familiares Biden, Hunter busca justicia legal alegando difusión ilícita de su información fiscal.
Hunter Biden se encuentra en una nueva encrucijada legal; esta vez está llevando la ofensiva contra el Servicio de Impuestos Internos (IRS). El lunes, Biden interpuso una demanda alegando que dos agentes del IRS habían compartido de forma incorrecta su información fiscal con el público, una movida que describió como una estrategia para “averiguarlo y avergonzarlo”.
El corazón de la demanda gira en torno a las alegaciones de que los agentes del IRS, identificados como Greg Shapley y Joe Ziegler, han abusado de su posición al divulgar detalles específicos de los años fiscales bajo investigación, así como información sobre las deducciones y las vulnerabilidades fiscales de Biden.
Hunter Biden, a través de su equipo legal, expresó su descontento con la manera en que el IRS ha manejado su información confidencial, alegando que la agencia no ha hecho lo suficiente para prevenir la difusión de sus detalles fiscales. En un extracto de la demanda, se establece que Hunter Biden “no tiene menos derechos que cualquier otro ciudadano, y ninguna agencia ni agente del gobierno tiene libertad irrestricta para violar sus derechos simplemente por ser quien es”.
En una declaración, el abogado de Shapley describió la demanda como una “ofensa frívola” y sostuvo que su cliente no hizo más que seguir los procedimientos establecidos. La aseveración continúa señalando que, una vez que el testimonio fue difundido por el Congreso, su cliente tiene «el derecho de discutir esa información pública».
Mientras tanto, la Casa Blanca ha mantenido una posición defensiva, afirmando que el presidente Joe Biden no ha estado involucrado en los negocios de su hijo. A pesar de los meses de investigaciones, no se ha encontrado evidencia significativa que relacione a Joe Biden con alguna actividad ilegal.
Al margen de la defensa de su padre, Hunter Biden se ha visto envuelto en controversias recientemente, con un acuerdo potencial que se derrumbó este verano sobre cargos menores relacionados con el impago oportuno de impuestos. La situación ha escalado, llegando al punto de una nueva acusación sobre una falsedad en una solicitud de compra de un arma de fuego en 2018.
Con las elecciones de 2024 en el horizonte, este caso resalta una vez más las tensiones políticas que rodean a la familia Biden. En el centro de este tornado legal, Hunter Biden está demandando un cumplimiento más estricto de las leyes federales sobre impuestos y privacidad, junto con una indemnización de 1.000 dólares «por todas y cada una de las difusiones no autorizadas de la información incluida en sus declaraciones de impuestos».
La tensión se acumula mientras David Weiss, quien recientemente obtuvo el estatus de fiscal especial, posee ahora una amplia autoridad para continuar investigando y reportar sus hallazgos, dejando una puerta abierta para posibles cargos adicionales contra Hunter Biden en el futuro.
Con el futuro político de la familia Biden colgando de un hilo delicado, este nuevo desarrollo promete ser un punto focal en el drama continuo que se está desarrollando en el escenario nacional.