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Tensión en el búnker: Las jugadoras del seleccionado español frente a un futuro incierto

Las protagonistas del seleccionado femenino se reúnen con el gobierno español en busca de garantías.

El lunes pasado, en una sede improvisada del Oliva Nova Beach&Golf Hotel, las jugadoras de la selección española de fútbol femenino mantuvieron una reunión crucial con Víctor Francos, el presidente del Consejo Superior de Deportes (CSD), en busca de una solución a la crisis que afecta a la Real Federación Española de Fútbol (RFEF). El encuentro, que ha generado una significativa atención mediática, tuvo lugar bajo el escrutinio de medio centenar de medios que se agolpaban en las puertas del complejo.

El tópico primordial de la discusión fue la posibilidad de una amnistía para las futbolistas, quienes esperan poder regresar a sus clubes sin enfrentar represalias si deciden abandonar la concentración actual. «Yo creo que mi postura ha sido muy clara, en ningún momento he cambiado de opinión. He renunciado a mucho», señaló Mapi León, jugadora del Barcelona, quien no ha dudado en expresar su inconformidad con la situación actual.

En este encuentro también participó Amanda Gutiérrez, presidenta de FUTPRO, un sindicato mayoritario en el ámbito del fútbol femenino, quien fue convocada a petición de las jugadoras para asesorarlas legalmente y facilitar un posible acuerdo.

Las demandas del grupo de jugadoras, que se han expresado tanto en comunicados públicos como en reuniones privadas con representantes de la RFEF, abarcan una serie de preocupaciones que van desde la reestructuración del organigrama deportivo hasta un cambio significativo en áreas como comunicación y marketing, y la secretaría general, entre otras. Las futbolistas han señalado a estos sectores como responsables de promover o permitir actitudes machistas, según lo expuesto en un comunicado previo.

Una parte significativa de la reunión se dedicó a discutir la ruta hacia las próximas elecciones en la RFEF, un tema que ha cobrado fuerza en los últimos días. Francos mencionó en una entrevista con TVE que «Va a haber unas elecciones en las que haya una renovación de la Asamblea, de los aplaudidores y aplaudidoras», destacando la urgencia de renovar y modernizar la federación.

Los representantes de la RFEF también estuvieron presentes en la reunión, representados por Rafael del Amo, presidente del Comité Nacional del Fútbol Femenino; Ana Álvarez, directora del Fútbol Femenino; Ángeles Aguilera, vicepresidenta de la Federación Extremeña; y Montse Tomé, la recién nombrada seleccionadora.

Hasta el momento, la resolución del conflicto permanece incierta. Las próximas horas serán cruciales para definir el camino a seguir, con las jugadoras esperando garantías por escrito que les permitan dejar la concentración sin temor a represalias. A pesar de la sombra de la incertidumbre, la selección femenina sigue con la vista fija en su debut en la Nations League este viernes, donde se enfrentarán a Suecia con el objetivo de clasificar para los Juegos Olímpicos de París 2024.