Durante una visita a la frontera sur, el fundador de SpaceX se pronuncia sobre la crisis migratoria, en un momento donde la política migratoria se encuentra en el ojo del huracán.
En una aparición que se siente tanto estratégica como reveladora, Elon Musk, el hombre detrás de Tesla y SpaceX, y ahora dueño de la red social X (anteriormente conocida como Twitter), ha ofrecido su perspectiva no solicitada pero resonante sobre la inmigración en los Estados Unidos. En un live en X, capturado por The Hill, junto al congresista republicano Tony Gonzales en Eagle Pass, Texas, Musk se declaró “extremadamente proinmigrante”.
“Deberíamos dejar entrar a todos los que son trabajadores y honestos», afirmó Musk, un inmigrante sudafricano que se ha convertido en una de las personalidades más polarizantes y reconocibles en la tierra de las estrellas y las barras. Sin embargo, no está dispuesto a extender la bienvenida a aquellos que “rompen la ley”. Una declaración que, como la mayoría de las cosas que salen de la boca de Musk, probablemente generará tanto aplausos como críticas.
La crisis migratoria ha sido un tema espinoso, exacerbado recientemente por el alcalde de Nueva York, Eric Adams, quien señaló que la inmigración masiva podría «destruir» la ciudad, instando a la administración Biden a ponerle freno. Aunque, irónicamente, dos semanas después de estas declaraciones, se permitió a casi medio millón de inmigrantes venezolanos residir y trabajar en Estados Unidos.
«Si Nueva York no puede asumirlo, ninguna parte del país puede», dijo Musk, una afirmación que resuena con un tono sombrío de fatalidad. A pesar de su retórica proinmigrante, no intentó interactuar con los migrantes en la frontera, eligiendo, en cambio, mantenerse a una distancia observacional.
Gonzales, por otro lado, apuntó directamente a la Casa Blanca, lamentando la falta de medidas contundentes para reducir los cruces ilegales de la frontera. Esto se produce en un momento en que la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de EE. UU. informa cifras alarmantes: aproximadamente 233.000 detenciones de migrantes irregulares en agosto, un salto del 27% respecto a julio.
Entonces, ¿qué significa todo esto en el gran esquema de las cosas? ¿Es Musk un defensor de los inmigrantes, un crítico pragmático o simplemente un espectador vocal? Como siempre, parece que será una mezcla de interpretaciones, y el debate, como la crisis migratoria misma, está lejos de resolverse.