RANAS

La revolución de las ranas: Hembras se «hacen las muertas» para evitar el apareamiento

Un nuevo estudio saca a la luz tácticas insólitas que las ranas hembras emplean para esquivar la atención no deseada de los machos.

En una revelación que podría considerarse un giro intrigante en la danza eterna del apareamiento animal, un nuevo estudio publicado en la revista Royal Society Open Science, nos invita a un viaje al misterioso mundo de la rana común (Rana temporaria Linnaeus). Atrás quedan los días en los que pensábamos que las hembras de esta especie eran simples espectadoras pasivas en la lucha frenética y a veces brutal de los machos por aparearse. «Antes se pensaba que las hembras no podían elegir o defenderse de esta coacción masculina», dice Carolin Dittrich del Museo de Historia Natural de Berlín. Pero, agárrense bien, porque resulta que estas damas anfibias tienen sus propios trucos bajo la manga (o la piel, en este caso).

El equipo de Dittrich observó y registró detenidamente las interacciones de apareamiento, descubriendo que un asombroso 83% de las hembras intentaron esquivar los avances de los machos girando sus cuerpos e incluso fingiendo su propia muerte, un comportamiento conocido como inmovilidad tónica.

“Las hembras no son pasivas, como se creía”, confirma Dittrich. Y resulta que este acto de resistencia es especialmente prominente entre las hembras más jóvenes y pequeñas. Las damas más diminutas se inclinan por una combinación de tácticas de evasión, que incluyen girar el cuerpo, emitir gritos de liberación, y sí, «hacerse las muertas».

La teoría predominante es que la inmovilidad tónica podría ser una respuesta al estrés. Es posible que las hembras más jóvenes, con menos experiencia en la arena del amor anfibio, encuentren los avances masculinos particularmente estresantes.

Pero, como con cualquier buen misterio científico, hay capas de complejidad aquí. Los investigadores no descartan que estos comportamientos podrían tener otros fines. Girar el cuerpo, por ejemplo, podría ser una estrategia para evaluar la fuerza y resistencia de un pretendiente potencial. En el complicado ballet del apareamiento, cada movimiento, cada giro y vuelta, podría ser una evaluación crítica, una danza de datos que informa a la hembra sobre la aptitud de su pareja.

«Creo que aunque llamemos rana común a esta especie y pensemos que la conocemos bien, sigue habiendo aspectos que desconocemos», reflexiona Dittrich. Y en esta intersección de lo conocido y lo desconocido, científicos como Dittrich y su equipo continúan su exploración apasionada, desvelando los secretos ocultos y las maravillas insospechadas del mundo natural que nos rodea.