El Observatorio Venezolano de Prisiones reporta acción policial en el Internado Judicial José Antonio Anzoátegui, mientras familiares y reclusos se mantienen en alerta.
La situación en el Internado Judicial José Antonio Anzoátegui, popularmente conocido como cárcel de Puente Ayala, en el estado Anzoátegui, se ha tornado tensa ante una intervención policial reportada por el Observatorio Venezolano de Prisiones (OVP).
A través de redes sociales, la organización no gubernamental informó sobre la acción, aunque hasta el momento no se cuenta con información oficial por parte de las autoridades penitenciarias o gubernamentales concernidas.
«Aunque no hay información oficial, como ya es costumbre, familiares de los presos del Internado Judicial ‘José Antonio Anzoátegui’, conocido como Puente Ayala, se mantienen alerta ante la inminente toma del penal. Información en proceso», escribió el OVP en sus redes sociales. La falta de un anuncio oficial por parte de la ministra de Asuntos Penitenciarios, Celsa Bautista; el ministro de Interior y de Justicia, Remigio Ceballos; o el ministro de Comunicación e Información, Freddy Ñañez, añade un manto de incertidumbre sobre los detalles y las razones detrás de la intervención.
El Observatorio apuntó que la acción policial no tomó por sorpresa a los reclusos. Detallaron que el pran, alias “Pata e’ Queso”, junto a sus luceros, llevaban días retirando sus pertenencias de detrás de los barrotes, lo que podría sugerir una posible coordinación o aviso previo respecto a la intervención. Esto llevó a la organización a cuestionar: “¿Esta toma también fue negociada con los líderes negativos?”, haciendo alusión a una posible negociación entre las autoridades y los líderes negativos dentro del penal.
La tensión en Puente Ayala refleja los desafíos persistentes en el sistema penitenciario venezolano, donde la falta de transparencia y las condiciones de detención continúan siendo temas de profunda preocupación para los defensores de derechos humanos y los familiares de los reclusos. En medio de la incertidumbre, los allegados a los internos se mantienen en estado de alerta, esperando claridad sobre la situación y el bienestar de sus seres queridos dentro del recinto carcelario.