Su compañera en Friends, y amiga cercana, no supera la muerte de Matthew Perry.
Los aficionados y el elenco de «Friends» están de luto. Matthew Perry, conocido mundialmente por su papel de Chandler Bing, ha fallecido a los 54 años, sacudiendo los cimientos de Hollywood y dejando un hueco en los corazones de sus compañeros y seguidores.
El impacto de su partida se sintió profundamente en el funeral realizado en el Forest Lawn de Los Ángeles, con la presencia de sus co-estrellas de «Friends» y otros amigos cercanos.
Jennifer Aniston, quien enfrenta la pérdida de su padre recientemente, se ve especialmente afectada por este nuevo golpe. «Es la segunda gran pérdida en menos de un año, con el primer aniversario de la muerte de su padre a la vuelta de la esquina. Aún no se ha recuperado del todo de aquello, y ahora esto la ha dejado completamente fuera de juego», expresó una fuente cercana a la actriz.
El legado de Perry va más allá de su personaje en «Friends». Fue un ícono cultural y un valiente luchador en su batalla personal contra las adicciones. En una entrevista con Diane Sawyer, Perry había expresado su gratitud hacia Aniston por el apoyo recibido durante sus momentos más difíciles. «Jennifer Aniston fue la que más se preocupó por mí», reveló.
La relación entre Perry y Aniston, marcada inicialmente por sentimientos románticos no correspondidos, se transformó en una sólida amistad. Perry encontró en Aniston un apoyo fundamental en su lucha contra el alcohol y las drogas. Esta conexión profunda y la mutua preocupación entre ellos se mantuvo firme a lo largo de los años.
El impacto de su muerte va más allá de los límites de «Friends». Perry se convirtió en un símbolo de resistencia y honestidad, abriendo camino para conversaciones más amplias sobre salud mental y adicciones. Su partida deja un vacío no solo en la industria del entretenimiento, sino también en la conciencia colectiva.
Hoy, el mundo despide a un actor talentoso, un amigo leal y un luchador incansable. Su legado perdurará en los corazones de quienes lo admiraron, tanto dentro como fuera de la pantalla. Con su partida, Matthew Perry deja un mensaje de esperanza y lucha, demostrando que, incluso en las batallas más difíciles, no estamos solos.