Los socialistas marcan el 15 y 16 de noviembre para el debate de investidura, mientras el acuerdo con Junts asegura los votos necesarios y el PNV finaliza su decisión.
La investidura de Pedro Sánchez como presidente del Gobierno de España está programada para debatirse en el Congreso de los Diputados los próximos 15 y 16 de noviembre, según confirmaron fuentes del Partido Socialista Obrero Español (PSOE) a OKDIARIO.
El acuerdo con Junts, que ha comprometido los votos de sus siete diputados, es un paso crucial que ha allanado el camino para la realización del debate parlamentario.
La confirmación oficial de estas fechas está pendiente de la comunicación de la presidenta de la cámara, Francina Armengol, del mismo partido que Sánchez. La votación de investidura, tras la cual Sánchez podría ser reelegido, se llevará a cabo después de las intervenciones de los portavoces parlamentarios en una sesión que está prevista para durar desde la mañana hasta la tarde.
No obstante, la ratificación final de Sánchez como presidente requiere aún el apoyo del Partido Nacionalista Vasco (PNV), el cual aún no ha declarado públicamente su voto. Santos Cerdán, secretario de Organización del PSOE, ha expresado en una conferencia de prensa que el acuerdo con el PNV está cerca de concretarse.
En cuanto a la mayoría necesaria para la investidura, Sánchez necesita al menos 176 votos para alcanzar la mayoría absoluta en el Congreso, compuesto por 350 escaños. De no lograrse en la primera votación, se procedería a una segunda donde bastaría una mayoría simple.
Los apoyos actuales para Sánchez incluirían los 121 escaños de su partido más los escaños de Sumar, ERC, Junts, PNV, Bildu y BNG, sumando un total de 178 votos y sobrepasando así el umbral requerido para su reelección.
La sesión de investidura se prevé tensa y llena de expectativas, en el marco de las protestas masivas que han tenido lugar en Madrid y otras ciudades españolas contra el pacto alcanzado con Junts, el cual incluye una propuesta de ley sobre la amnistía de los líderes del procés catalán.
Con las calles resonando con el descontento de parte de la población, la política española se enfrenta a un momento crítico de su historia reciente.