Organizaciones internacionales acusan al régimen cubano de negligencia médica en el caso de Luis Barrios Díaz, fallecido en prisión.
La comunidad internacional ha puesto su mirada en Cuba tras la muerte de Luis Barrios Díaz, un preso político de 36 años, cuyo deceso ha sido atribuido a la desatención médica en una cárcel de la isla. Barrios, condenado a nueve años de prisión por su participación en las protestas pacíficas del 11 de julio de 2021, falleció a causa de una afección respiratoria que, según denuncias, se desarrolló y agravó durante su encarcelamiento.
La Asamblea de la Resistencia Cubana (ARC) y el Frente Hemisférico por la Libertad (FHL) se han pronunciado al respecto, responsabilizando directamente al «régimen castrista» por la muerte del joven. «Luis es un mártir de la patria, digno hijo de la nación cubana, que sufrió prisión y torturas por reclamar la libertad y derechos humanos de los que nunca pudo disfrutar en su patria», afirmó Orlando Gutiérrez Boronat, coordinador de la ARC.
La denuncia se intensifica con la afirmación de que Barrios sufrió un cuadro de problemas respiratorios que terminaron en una broncopulmonía avanzada, padecimiento que no recibió «la atención médica necesaria, por decisión de las autoridades penales». Esta situación ha sido condenada por la ARC y el FHL, este último calificando el hecho como una violación de derechos humanos y un posible crimen de lesa humanidad.
Las organizaciones destacan que el caso de Barrios no es aislado y advierten sobre «el grave deterioro de la salud de decenas de manifestantes pacíficos del 11J en prisión en los últimos dos años», un llamado de atención a la comunidad internacional y a los países que mantienen lazos con Cuba. El FHL ha condenado las condiciones de detención y las torturas que padecen los presos políticos cubanos, exhortando a una acción global para su liberación inmediata.
La situación personal de Barrios, quien deja un hijo de seis años y cuya madre reside en Estados Unidos, añade una capa de tragedia humana al caso. Los familiares y allegados sostienen que antes de su encarcelamiento, Barrios era una persona sana. Se espera la realización de una autopsia y posterior cremación del cuerpo en La Habana.
Este incidente se suma a los aproximadamente 700 casos de sentencias de cárcel registrados por ONGs como Justicia 11J y Prisoners Defenders, tras las históricas protestas antigubernamentales del 11 de julio en Cuba, que han resonado en la comunidad internacional como un grito por la libertad y los derechos humanos en la isla caribeña.