La superestrella del fútbol acusada de promover valores no registrados y NFTs en asociación con Binance.
Cristiano Ronaldo, la reconocida superestrella del fútbol, enfrenta una demanda colectiva de $1.000 millones por su participación en la promoción de Binance, el mayor intercambio de criptomonedas del mundo.
La demanda, presentada en un tribunal de Florida, acusa a Ronaldo de contribuir en la oferta y venta de valores no registrados, incluyendo tokens no fungibles (NFTs) de él mismo, que supuestamente han causado pérdidas financieras significativas a los inversores.
La asociación de Ronaldo con Binance comenzó en noviembre de 2022, cuando lanzaron conjuntamente NFTs que representaban momentos icónicos del jugador en forma de estatutos digitales.
La empresa y Ronaldo realizaron un lanzamiento ampliamente publicitado de estos NFTs, incluso a través de las redes sociales del jugador. Los NFTs, vinculados al mundo de las criptomonedas, son activos digitales únicos y verificables comercializables en blockchain.
La demanda sostiene que Ronaldo hizo declaraciones engañosas y permitió el uso de su imagen en promociones de Binance que incluían la venta de criptovalores no registrados. Los demandantes argumentan que ni Ronaldo ni Binance revelaron adecuadamente la compensación recibida por el futbolista, un requisito según la ley de valores de EE.UU.
Este caso recuerda a la multa impuesta a Kim Kardashian por más de 1 millón de dólares el año pasado en una situación similar, citando las palabras del presidente de la Comisión de Bolsa y Valores (SEC), Gary Gensler, sobre la obligación de las celebridades de revelar los detalles de su compensación por promocionar inversiones en valores.
La demanda colectiva, que busca una suma superior a los $1.000 millones, destaca el continuo uso de Ronaldo para promocionar a Binance, incluyendo una publicación reciente en su cuenta X de 110 millones de seguidores. Este caso pone de manifiesto el creciente escrutinio sobre las celebridades que promocionan criptomonedas y la importancia de adherirse a las regulaciones de valores para proteger a los inversores en este mercado volátil.