GUERRA

Reanudación del conflicto entre Israel y Hamás trae inmediato caos

Intensificación de los ataques en Gaza con víctimas civiles y llamados a la evacuación en medio de acusaciones cruzadas.

La reanudación este viernes de la guerra entre Israel y Hamás ha llevado a una escalada de violencia en Gaza, con hospitales abrumados por la llegada de heridos y muertos palestinos y residentes huyendo en busca de refugio. Este violento resurgimiento ocurre tras el fracaso de las negociaciones para prorrogar una tregua que había durado una semana.

Periodistas de Reuters en Jan Yunis, ubicada en el sur de Gaza, reportaron intensos bombardeos en las zonas orientales y la formación de grandes columnas de humo. La situación ha obligado a los residentes a abandonar sus hogares, buscando seguridad hacia el oeste.

En el norte de Gaza, anteriormente la principal zona de guerra, se observaban enormes columnas de humo desde el lado israelí de la valla. Mientras tanto, las sirenas de los cohetes resonaban en el sur de Israel, con militantes palestinos disparando desde el enclave costero.

Las autoridades sanitarias de Gaza informaron que al menos 184 personas han muerto y cientos han resultado heridas en ataques aéreos que alcanzaron al menos 20 viviendas. Tanto Israel como Hamás se acusan mutuamente de provocar la reanudación de la violencia. La Casa Blanca, por su parte, señaló a Hamás por no haber presentado una nueva lista de rehenes que permitiera extender la tregua.

La ONU advirtió que los combates empeorarán una ya grave emergencia humanitaria. «El infierno en la Tierra ha vuelto a Gaza», expresó Jens Laerke, portavoz de la oficina humanitaria de la ONU en Ginebra.

Los bombardeos han sido particularmente intensos en Jan Yunis y Rafah, donde muchas familias han buscado refugio. En el hospital Nasser de Jan Yunis, se presenció la angustia de una madre por su hijo herido. En Rafah, residentes sacaban a niños pequeños de una casa dañada.

Los habitantes de Gaza temen que el bombardeo de las zonas meridionales pueda significar una expansión de la guerra a áreas previamente consideradas seguras. Folletos lanzados en Jan Yunis ordenaban la evacuación a la ciudad de Rafah, en la frontera egipcia.

Israel y Hamás no lograron extender la tregua, que había permitido el intercambio diario de rehenes y la entrega de ayuda. Israel acusó a Hamás de negarse a liberar a todas las mujeres retenidas, mientras que un funcionario palestino citó diferencias sobre las mujeres soldados israelíes.

Qatar, un mediador clave, afirmó que las negociaciones para restablecer la tregua continúan, aunque el nuevo bombardeo israelí complica los esfuerzos.

El conflicto ha devastado gran parte de Gaza. Las autoridades sanitarias palestinas reportan más de 15.000 muertes confirmadas y miles de desaparecidos, muchos posiblemente sepultados bajo escombros. Este desarrollo marca un sombrío retorno a la violencia y pone de relieve la urgente necesidad de soluciones diplomáticas sostenibles.