Las Fuerzas de Defensa de Israel consolidan su presencia en el norte de Gaza y extienden la ofensiva al sur, mientras continúan los intensos combates.
El Ejército israelí ha dado un paso decisivo en su operación militar en la Franja de Gaza, completando el cerco al campo de refugiados de Yabalia, ubicado en el norte del enclave. Esta área, considerada como uno de los bastiones de Hamas, ha sido el foco de intensas acciones militares por parte de las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI). Paralelamente, la ofensiva terrestre israelí avanza hacia el sur de la Franja, en una clara señal de la escalada del conflicto.
Un portavoz militar de Israel informó que las tropas han tomado control de posiciones clave en Yabalia, desde donde Hamas había llevado a cabo ataques contra las fuerzas israelíes. Durante estas operaciones, las FDI han destruido infraestructura considerada terrorista, incautado armas y lanzadores en complejos civiles, y dirigido ataques aéreos contra numerosos combatientes de Hamas.
Este avance estratégico en Yabalia coincide con la continuación de la ofensiva militar hacia el sur de Gaza, donde las fuerzas israelíes buscan consolidar su control en la mitad norte del enclave, ya en gran medida ocupada por Israel. Además, se han reportado ataques en zonas utilizadas por las fuerzas Nukhba, la unidad de élite de Hamas, logrando eliminar a varios combatientes y destruir cohetes.
Las acciones militares no se limitan a las operaciones terrestres, pues la Armada israelí ha respaldado con ataques aéreos contra docenas de objetivos militares de Hamas y otros grupos armados en la Franja. Estos ataques han incluido disparos de mortero contra las fuerzas israelíes.
Por otro lado, las Brigadas al Qasam y las Al Quds, brazos armados de Hamas y de la Yihad Islámica respectivamente, han intensificado sus ataques con artillería contra los tanques israelíes que se aproximan a Jan Yunis, en el sur de la Franja, marcando el próximo objetivo de Israel en esta nueva fase de la guerra.
La situación humanitaria en Gaza es crítica, con más de 15.800 personas fallecidas y aproximadamente 7.000 bajo escombros desde el inicio del conflicto hace dos meses. Israel ha reportado que entre los fallecidos en Gaza, al menos 5.000 eran miembros de Hamas, mientras que en sus propias filas han caído 78 soldados.
La violencia se ha recrudecido tras el colapso de una tregua de siete días, que permitió la entrada de ayuda humanitaria. A pesar del cese temporal de las hostilidades, Israel ha retomado y expandido su ofensiva, cortando el acceso a la ayuda por el cruce de Rafah. Sin embargo, el Cogat ha informado sobre la entrada reciente de 180 camiones con ayuda humanitaria, incluyendo alimentos, agua, equipos de refugio, suministros médicos y combustible.