El Primer Ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, se opone a la idea de que la Autoridad Nacional Palestina controle Gaza post-guerra.
El primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, expresó abiertamente este martes su oposición a una propuesta clave de Estados Unidos sobre el futuro de la Franja de Gaza tras el conflicto con Hamas.
En una declaración que subraya las tensiones con su principal aliado, Netanyahu rechazó la idea de que la Autoridad Nacional Palestina (ANP) gobierne Gaza después de la guerra.
Netanyahu, al comentar sobre «el día después de Hamas», insistió en que no permitirá la entrada a Gaza de quienes apoyan el terrorismo, en clara referencia a la ANP. Esta postura refleja el escepticismo del primer ministro sobre los Acuerdos de Oslo y su compromiso con políticas de ocupación en Cisjordania.
La ANP, liderada por Mahmud Abbas, perdió el control de Gaza en 2007 tras el ascenso de Hamas. A pesar de que Abbas se ha mostrado dispuesto a asumir el poder en la región, Netanyahu subraya que no repetirá el «error de Oslo».
Estados Unidos, bajo la administración Biden, ha mostrado su apoyo a la idea de que la ANP asuma un papel de liderazgo en Gaza. Sin embargo, las recientes declaraciones de Netanyahu indican una clara divergencia en las visiones de ambos países respecto al futuro del territorio.
El conflicto en Gaza ha generado una intensa presión internacional para un alto el fuego. A pesar de esto, Estados Unidos vetó recientemente una resolución del Consejo de Seguridad de la ONU que instaba a un cese de las hostilidades, liberación de rehenes y despliegue de ayuda humanitaria en Gaza.
En medio de estas tensiones, el asesor de seguridad nacional de la Casa Blanca, Jake Sullivan, planea visitar Israel para dialogar con Netanyahu sobre los plazos para finalizar los combates en Gaza. Sullivan llevará consigo ideas de Biden sobre el tema y también buscará comprender mejor la posición de Netanyahu.
Sullivan también abordará los comentarios recientes de Netanyahu sobre mantener un control de seguridad abierto sobre Gaza una vez finalizada la guerra, una postura que contradice la visión de Estados Unidos sobre el regreso de la Autoridad Palestina y la reanudación de las conversaciones de paz.