Greg Abbott promulga una ley que endurece las sanciones contra la migración irregular y desafía la política de Biden.
El gobernador republicano de Texas, Greg Abbott, ha promulgado una ley que criminaliza a los migrantes que ingresen de manera irregular al estado fronterizo con México. Esta medida, que entra en vigor en marzo, representa un claro desafío a las políticas migratorias del presidente demócrata Joe Biden.
Según Abbott, la ley «crea un delito penal por entrar ilegalmente a Texas desde un país extranjero» y establece penas de hasta 20 años por reincidencia. Las autoridades locales tendrán la autoridad para detener a los migrantes sin la documentación necesaria, mientras que los jueces podrán expulsarlos del país.
La ley, que ha sido calificada de «medidas de corte político» por México, podría generar una prolongada batalla legal. En Estados Unidos, las leyes de inmigración y el control fronterizo son competencias exclusivas del gobierno federal, lo que podría llevar a enfrentamientos jurídicos y políticos.
Organizaciones como el Fondo Educativo de la Asociación Nacional de Funcionarios Latinos Electos y Designados (NALEO) han expresado su preocupación por el impacto negativo de estas medidas en las comunidades latinas, advirtiendo sobre posibles separaciones familiares y problemas con las autoridades.
La crisis migratoria es un tema de fuerte tensión entre republicanos y demócratas, especialmente en el contexto de las próximas elecciones presidenciales. El expresidente republicano Donald Trump ha realizado declaraciones polémicas sobre los migrantes, contribuyendo a un clima de confrontación política.