Tras 52 años de reinado, la monarca cede el trono a su hijo, el príncipe heredero Frederik.
En un movimiento sorpresivo, la reina Margarita II de Dinamarca anunció su decisión de abdicar al trono. La noticia llegó a través de un discurso televisivo durante la víspera de Año Nuevo, marcando un cambio histórico en la monarquía danesa.
«Dejaré el trono a mi hijo, el príncipe heredero Frederik», declaró la reina Margarita, quien cumplirá 52 años de reinado este 14 de enero. Este anuncio inesperado pone fin a su largo reinado, siendo la soberana con más años de servicio en la historia de Dinamarca.
Margarita II, de 83 años, explicó que su reciente cirugía en la espalda fue un factor decisivo en su reflexión sobre el futuro de la monarquía. «La cirugía naturalmente me hizo pensar en el futuro: si había llegado el momento de dejar la responsabilidad a la próxima generación», indicó.
El príncipe Frederik, de 55 años, ha sido preparado para asumir el trono. Conocido por ser el primer miembro de la realeza danesa en completar una educación universitaria, Frederik se ha ganado el respeto y la admiración del público danés, transformando su imagen de joven fiestero a un digno sucesor.
No se espera una ceremonia de coronación formal para Frederik, en contraste con otras monarquías como la británica. En su lugar, el palacio anunciará su ascensión al trono el día indicado. La reina Margarita es una figura querida y respetada en Dinamarca, conocida cariñosamente como Daisy. Su decisión ha sido recibida con sorpresa y emoción por el pueblo danés.
Margarita II ha sido una monarca moderna, conocida por su amor por las artes y su estilo de vida sencillo, rechazando los teléfonos móviles e internet. Durante su reinado, ha puesto énfasis en el papel de Dinamarca en cuestiones globales como el cambio climático, y ha sido una voz de sabiduría y estabilidad.
La primera ministra Mette Frederiksen expresó su gratitud a la reina por su servicio dedicado: «En nombre de todo el pueblo, me gustaría agradecer de todo corazón a su majestad, la reina, por su dedicación de toda la vida y sus incansables esfuerzos por el reino».
Este cambio en la monarquía danesa se produce en un contexto donde varias casas reales europeas enfrentan desafíos modernos, incluyendo la reciente controversia en la familia real danesa por la reducción de sus miembros. La abdicación de Margarita II marca el fin de una era y el comienzo de una nueva fase en la historia de la monarquía danesa.