Declaraciones detallan cómo se atraía a jóvenes a la casa de Epstein para masajes.
Una nueva serie de documentos relacionados con el difunto financiero y acusado de delitos sexuales Jeffrey Epstein se hicieron públicos el jueves, arrojando luz sobre las tácticas de reclutamiento utilizadas para atraer a jóvenes a su casa. Las declaraciones detallan cómo se convencía a las niñas para ir a la residencia de Epstein y luego se les ofrecía un pago adicional por traer amigas.
Según una de las declaraciones, una mujer que tenía entre 16 y 17 años en ese momento indicó que carecía de experiencia en masajes y no esperaba que su visita implicara actividad sexual. «Jeffrey me quitó la ropa sin mi consentimiento la primera vez que lo conocí», señala una transcripción de su declaración, aunque el nombre de la mujer ha sido redactado por razones de privacidad.
Joseph Recarey, exdetective de policía de Palm Beach y ya fallecido, mencionó en 2016 el papel de Ghislaine Maxwell, quien cumple actualmente 20 años de prisión, en la búsqueda de niñas para masajes y trabajo en la casa de Epstein. Recarey afirmó haber entrevistado a unas 33 mujeres, de las cuales sólo dos, que eran mayores de edad, tenían alguna experiencia previa en masajes. La mayoría de las chicas eran menores de 18 años.
«A cada una de las víctimas que fueron a la casa se les pidió que trajeran a sus amigos a la casa. Algunas cumplieron y otras no», añadió Recarey en su testimonio.
Las descripciones contenidas en los documentos sobre cómo se reclutaba a las mujeres coinciden con los testimonios presentados durante el juicio penal de Maxwell. Un tribunal federal de Nueva York publicó el jueves diecinueve pruebas, sumando un total de 327 páginas de documentos anteriormente sellados.