Fuertes vientos, tornados y nevadas golpean el centro y sureste de Estados Unidos, causando víctimas mortales y cortes de electricidad.
La primera gran tormenta invernal de este año en Estados Unidos ha dejado un saldo de al menos tres muertos y ha causado extensos cortes de electricidad, afectando a unas 300.000 personas en el centro y sureste del país. Las víctimas incluyen a una persona en Clayton, Georgia, fallecida por la caída de un árbol sobre su vehículo, y dos muertes en Carolina del Norte y Alabama, ocasionadas por tornados.
Florida ha sido uno de los estados más afectados, con cerca de 93.000 personas sin electricidad al mediodía, seguido por Carolina del Norte, Georgia, Pensilvania y Alabama. El Servicio Nacional de Meteorología ha reportado múltiples tornados en Florida, y se han informado daños considerables en localidades como Panama City Beach y Bay County.
Por otro lado, fuertes nevadas han cubierto áreas desde el norte de Texas hasta los Grandes Lagos. Alrededor de 40 millones de personas en EE. UU. se encuentran bajo alerta grave debido a la tormenta, y se espera que las fuertes ráfagas de viento afecten el sur y el noreste del país.
El riesgo de inundaciones es alto en zonas de fuertes lluvias, especialmente desde Florida hasta el sur de Maine. Se prevé que las próximas 24 a 48 horas traigan fuertes lluvias a estados del este, incluyendo áreas urbanas importantes como Washington D.C., Nueva York y Boston. En Nueva York, se ha emitido una alerta por fuerte viento para esta noche, con posibles ráfagas de más de 100 kilómetros por hora.
Las autoridades y expertos han instado a la población a evitar salir a la calle en zonas costeras y a estar preparados ante posibles inundaciones, especialmente en áreas que ya acumularon nieve durante el temporal del fin de semana pasado.