Corea del Norte escala tensiones con lanzamiento de misil a mar japonés

MISIL

El lanzamiento de un IRBM por Corea del Norte al mar de Japón intensifica las preocupaciones de seguridad en la península coreana.

Corea del Norte inició el año incrementando las tensiones regionales con el lanzamiento de un misil balístico de rango intermedio (IRBM) al mar de Japón, según reportes del Estado Mayor Conjunto (JCS) de Corea del Sur.

El misil fue lanzado desde la zona de Pionyang aproximadamente a las 14:55 hora local (5:55 GMT) de hoy 14 de enero, marcando un notable aumento en las actividades militares del régimen de Kim Jong-un.

El Ministerio de Defensa japonés inicialmente especuló que el proyectil podría haber sido un misil balístico de corto alcance (SRBM), pero los informes más recientes confirman que se trató de un IRBM.

Este lanzamiento es particularmente significativo debido a la tecnología de combustible sólido utilizada, que, a diferencia del combustible líquido, permite un almacenamiento y despliegue más rápidos del misil, aumentando así las capacidades ofensivas de Corea del Norte.

Este último acto de provocación llega tras un período de intensificación de las maniobras militares por parte de Corea del Norte, incluyendo el lanzamiento de un misil balístico de largo alcance (ICBM) de combustible sólido, el Hwasong-18, el pasado 18 de diciembre. Además, recientes ejercicios de artillería cerca de la disputada frontera marítima occidental han exacerbado las tensiones en la península.

En respuesta, Seúl ha realizado sus propios simulacros con fuego real y ha anunciado la reanudación de las maniobras militares en la zona fronteriza. Este incremento en la actividad militar entre ambas Coreas, que técnicamente siguen en estado de guerra, marca una escalada en la tensión desde que Pionyang suspendiera un acuerdo militar bilateral en 2018 destinado a evitar enfrentamientos en la frontera.

El lanzamiento del misil IRBM por Corea del Norte no solo representa un desafío directo a la seguridad regional, sino que también pone de manifiesto la urgente necesidad de abordar la creciente inestabilidad en la península coreana.

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