BIDEN

EE.UU. impone sanciones frente a la violencia en Cisjordania

La administración Biden toma medidas concretas contra actos de violencia que amenazan la estabilidad en Medio Oriente.

En un movimiento significativo para abordar la creciente violencia en Cisjordania, el presidente Joe Biden ha firmado una orden ejecutiva que establece sanciones contra aquellos cuyas acciones han provocado una «desestabilización» en la zona.

Esta decisión refleja la profunda preocupación de Estados Unidos ante los «altos niveles de violencia de los colonos extremistas, el desplazamiento forzado de personas y aldeas y la destrucción de propiedades», los cuales, según Biden, «han alcanzado niveles intolerables».

La medida busca no solo frenar la violencia sino también salvaguardar los objetivos de política exterior de EE.UU., incluida la aspiración de una solución de dos Estados que garantice seguridad, prosperidad y libertad para israelíes y palestinos por igual.

El presidente Biden ha enfatizado que las acciones de los colonos representan una «amenaza inusual y extraordinaria» para la seguridad nacional y la política exterior estadounidense.

Las sanciones serán aplicadas por el Departamento de Estado a individuos involucrados en actos violentos destinados a desplazar a palestinos de sus tierras, destacando cuatro casos específicos que ilustran la gravedad de la situación.

Entre los sancionados se encuentra David Chai Chasdai, acusado de incendiar vehículos y edificios, así como de agresiones que resultaron en la muerte de un civil palestino.

Otros casos incluyen a Einan Tanjil, por agresiones a agricultores palestinos y activistas israelíes; Shalom Zicherman, por ataques a activistas; y Yinon Levi, señalado por liderar grupos que infunden miedo entre civiles palestinos y beduinos.

La Casa Blanca ha aclarado que la orden ejecutiva no se limita a ciudadanos israelíes, sino que se extiende a palestinos o cualquier extranjero cuyas acciones violen la estabilidad de Cisjordania.

Esta medida se suma a esfuerzos previos, como las restricciones de visa anunciadas por el Secretario de Estado Antony Blinken y una directiva del Consejo de Seguridad Nacional, todos dirigidos a mitigar la violencia y avanzar hacia la paz en la región.

La decisión de Biden de sancionar a individuos específicos por su participación en actos de violencia subraya el compromiso de EE.UU. con una solución pacífica y justa al prolongado conflicto en Medio Oriente.