El mandatario ucraniano subrayó la importancia de fortalecer las defensas aéreas para salvaguardar pueblos, ciudades e infraestructuras críticas de los persistentes ataques con drones y misiles rusos.
Frente a un año de desafíos sin precedentes, Ucrania establece sus prioridades estratégicas para 2024, centrando sus esfuerzos en debilitar las fuerzas de Rusia y reforzar sus propias defensas. En un discurso dirigido a la nación, el presidente Volodímir Zelensky delineó un plan de resistencia que busca no solo proteger el territorio ucraniano sino también infligir «pérdidas sistemáticas» a los atacantes rusos.
El mandatario ucraniano subrayó la importancia de fortalecer las defensas aéreas para salvaguardar pueblos, ciudades e infraestructuras críticas de los persistentes ataques con drones y misiles rusos. Estos esfuerzos se ven como vitales tras los recientes ataques que dejaron víctimas fatales en Kiev y el óblast de Mikoláyiv, evidenciando la urgencia de una mayor protección.
«Nuestra tarea este año no es simplemente reforzar al máximo nuestro escudo aéreo y las capacidades de largo alcance de Ucrania, sino también infligir a Rusia el máximo posible de pérdidas sistemáticas», afirmó Zelensky, marcando una estrategia de desgaste contra las fuerzas rusas.
La congelación de los activos rusos en Occidente, una medida en la que trabaja el Grupo de los Siete (G7), se contempla como parte de una estrategia más amplia para agotar los recursos de Rusia. Ucrania, enfrentando una desventaja en munición para artillería y sin posibilidades inmediatas de avanzar en el frente, se ve obligada a mantener sus posiciones y confiar en el impacto de las bajas rusas para debilitar al enemigo.
El Estado Mayor ucraniano reporta significativas pérdidas rusas en los recientes enfrentamientos, con más de 900 soldados, 11 tanques y 24 sistemas de artillería perdidos por Rusia en un solo día. Además, Ucrania logró destruir 11 de los 17 drones iraníes Shahed lanzados por Rusia, demostrando la eficacia de sus defensas aéreas.
Este enfoque de resistencia se reafirmó durante la reciente visita a Kiev de Josep Borrell, alto representante de la Unión Europea para Asuntos Exteriores, quien prometió acelerar el suministro de munición a Ucrania. Con el apoyo internacional y una estrategia enfocada en infligir daños constantes, Ucrania se prepara para afrontar los retos del 2024, manteniendo firme su determinación de defender su soberanía.