La defensora de derechos humanos, Rocío San Miguel, fortalecida y confiada en su inocencia, recibe la visita de su hija en el Helicoide, en medio de su lucha legal.
Rocío San Miguel, destacada activista y presidenta de la ONG Control Ciudadano, recibió la visita de su hija Miranda Díaz San Miguel. Este encuentro familiar, el primero desde su detención el pasado 9 de febrero, tuvo lugar en la sede del Servicio Bolivariano de Inteligencia Nacional (Sebin) en El Helicoide.
El abogado defensor, Joel García, compartió a través de la red social X la fortaleza y confianza que San Miguel mantiene en su inocencia, subrayando la injusticia de su detención. A pesar de las graves acusaciones que pesan sobre ella —traición a la patria, conspiración, terrorismo y asociación, vinculadas a una presunta conspiración contra Nicolás Maduro y otros funcionarios—, San Miguel y su equipo legal insisten en la falta de pruebas que la comprometan.
La situación legal de San Miguel se complica ante los obstáculos para ejercer su derecho a una defensa técnica de confianza, un derecho fundamental en cualquier sistema jurídico que se precie de ser justo y democrático.
García denuncia la estrategia de mantener a San Miguel en una indefensión legal, dificultando la juramentación de su defensa y, con ello, el ejercicio de recursos legales como la apelación o la solicitud de diligencias investigativas.