La decisión unánime de la Sala de Apelaciones de la CPI mantiene vivo el escrutinio sobre las acciones del régimen venezolano.
La Sala de Apelaciones de la Corte Penal Internacional (CPI) emitió una sentencia clave este viernes, confirmando la continuidad de la investigación por crímenes de lesa humanidad en Venezuela, a pesar de los esfuerzos del régimen de Nicolás Maduro por detener el proceso.
Esta decisión, anunciada por el juez Marc Perrin de Brichambaut, presidente de la Sala de Apelaciones, representa un momento significativo en el largo camino hacia la justicia para las víctimas venezolanas de abusos a los derechos humanos.
La investigación de la CPI, que busca esclarecer las acusaciones de crímenes de lesa humanidad cometidos en el país caribeño, había sido autorizada previamente por la Sala de Cuestiones Preliminares I. Sin embargo, la administración de Maduro había intentado frenar el avance de la investigación, alegando que Venezuela ya estaba llevando a cabo acciones nacionales pertinentes. La Fiscalía de la CPI, sin embargo, argumentó que tales acciones no eran genuinas ni cubrían la totalidad de los delitos investigados, lo que llevó a la solicitud de reanudación de la investigación en noviembre de 2022.
La apelación presentada por el régimen venezolano buscaba revertir esta decisión, pero tras una revisión exhaustiva, incluida una audiencia pública donde se escucharon todas las partes involucradas, la Sala de Apelaciones ha decidido por unanimidad rechazar los argumentos del régimen y confirmar la investigación.
Esta decisión no solo subraya la gravedad de las acusaciones contra el régimen de Maduro, sino que también refleja el compromiso de la comunidad internacional con el respeto a los derechos humanos y la justicia para las víctimas de abusos. Paolina Massidda, representante de la Oficina de Defensa Pública de las Víctimas de la CPI, enfatizó la posición de las víctimas, señalando que el Estado venezolano no ha investigado ni investigará genuinamente los crímenes contra sus familiares y amigos.
Además, el Instituto Casla ha denunciado recientemente la crítica situación que atraviesan los presos políticos en Venezuela, agregando otra capa de urgencia a la investigación de la CPI resaltando condiciones inhumanas de detención.