En medio del conflicto en Gaza, el presidente turco defiende a Hamás y acusa a Israel de cometer «crímenes contra la humanidad».
En una declaración que no deja lugar a dudas sobre la posición de Turquía en el actual conflicto entre Israel y Palestina, el presidente Recep Tayyip Erdogan ha reafirmado este sábado su apoyo inquebrantable a los dirigentes del grupo militante palestino Hamás, a pesar de ser considerado una organización terrorista por la Unión Europea y otros países.
«Nadie puede llevarnos a calificar a Hamás como organización terrorista», proclamó Erdogan en un discurso pronunciado en Estambul, subrayando la disposición de Turquía de respaldar y mantener un diálogo abierto con el grupo.
Esta postura de Erdogan surge en un momento de especial tensión en Gaza, desencadenada por un ataque de Hamás en Israel el 7 de octubre que resultó en la pérdida de al menos 1.160 vidas, según cifras oficiales israelíes.
La respuesta de Israel no se ha hecho esperar, con una ofensiva terrestre y aérea que, según datos del Ministerio de Salud de Gaza, ha ocasionado la muerte de más de treinta mil personas en el territorio.
El líder turco, conocido por sus críticas hacia Israel, ha tildado al país de «estado terrorista» y lo ha acusado de «cometer genocidio» en Gaza. Las relaciones entre Turquía e Israel, que parecían encaminarse hacia una nueva era de entendimiento en 2022 después de una década de tensiones, se ven nuevamente en riesgo ante estas declaraciones.
Erdogan ha llegado incluso a comparar al primer ministro israelí Benjamin Netanyahu con dictadores como Adolf Hitler, por «los crímenes contra la humanidad» cometidos en Gaza.
Además de su firme posicionamiento político, Turquía ha actuado en el plano humanitario, enviando hasta la fecha 40.000 toneladas de ayuda a Gaza. Erdogan anunció el envío de un barco adicional de la Media Luna Roja turca con 3.000 toneladas de ayuda, demostrando el compromiso de Turquía con el bienestar del pueblo palestino.