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Gustavo Petro y la controversia Constituyente: Entre la promesa y la praxis

El presidente colombiano desmiente intenciones de reelección tras proponer una asamblea nacional constituyente, sumergiendo al país en un debate constitucional.

En una entrevista con el diario bogotano El Tiempo, el presidente de Colombia, Gustavo Petro, se vio en la necesidad de aclarar su posición respecto a la Asamblea Nacional Constituyente propuesta por él mismo. Contrario a lo que muchos pudieran pensar, Petro aseguró que su intención no es buscar la reelección ni ampliar su mandato, que culmina el 7 de agosto de 2026. «No estoy buscando una reelección presidencial. No tengo intención de reelegirme y no impulsaré reformas o una constituyente en ese sentido, así lo he dicho desde siempre», manifestó el mandatario, despejando el aire de especulaciones.

El tema de la reelección es delicado en Colombia, recordando el caso de Álvaro Uribe en 2005, quien modificó la Constitución para permitir la reelección presidencial inmediata, un cambio que fue revocado en 2015 después del segundo mandato de Juan Manuel Santos.

El viernes pasado, Petro sorprendió al país al proponer la convocatoria de una Asamblea Nacional Constituyente frente a las dificultades para aprobar sus reformas en el Congreso. Esta iniciativa ha sido recibida con escepticismo e incluso críticas por parte de políticos de diversas corrientes, incluyendo algunos de sus propios aliados durante las elecciones presidenciales de 2022.

Además, se ha revivido una promesa de campaña de 2018, en la que Petro, en alianza con el partido Alianza Verde, se comprometió a no convocar a una asamblea constituyente. Frente a las críticas y recordatorios de esta promesa, el presidente explicó que las circunstancias han cambiado desde su derrota en esas elecciones y la posterior gestión de Iván Duque, justificando así la necesidad de medidas drásticas ante lo que describe como una situación de «expoliación y robo» en el gobierno.

Petro detalló que el proceso para realizar la constituyente comenzará con la organización de comités municipales y la convocatoria al pueblo a la movilización y al debate, haciendo énfasis en la participación ciudadana desde la base de la sociedad. A pesar de los retos legislativos y políticos que implica este proceso, el presidente enfatiza que la fuerza del movimiento radica en el pueblo, y no en las mayorías parlamentarias.

La proposición de una Asamblea Nacional Constituyente por parte de Petro abre un nuevo capítulo en la política colombiana, uno lleno de debate, expectativas y, sobre todo, la promesa de un cambio estructural dirigido desde y por el pueblo. Sin embargo, resta ver cómo se desarrollará este proceso y si logrará concretarse antes del término de su mandato en 2026.