A sus 74 años, el exembajador y analista político se convierte en el «candidato tapa» para las cruciales elecciones presidenciales de julio.
En una movida que ha tomado por sorpresa al espectro político venezolano, Edmundo González Urrutia, de 74 años, emerge como la figura seleccionada por la oposición para encarar las elecciones presidenciales del próximo 28 de julio. Este anuncio llega después de que el Consejo Nacional Electoral (CNE) otorgara una prórroga para la inscripción de candidaturas, un gesto interpretado como una ventana de oportunidad por la Plataforma Unitaria Democrática (PUD).
Con una distinguida trayectoria como exembajador, escritor, y profesor, González no es ajeno a los meandros de la política internacional ni a los análisis críticos sobre la situación venezolana. Entre 2013 y 2015, fungió como coordinador de enlace internacional de la Mesa de Unidad Democrática (MUD), rol desde el cual fortaleció los lazos de la oposición venezolana con el mundo.
Su formación académica, completada en la Universidad Central de Venezuela y en la American University en Washington, y su vasta experiencia en cargos diplomáticos, incluyendo embajadas en Argentina y Argelia, hacen de González un candidato de perfil alto y experiencia indiscutible. Además, su rol como director suplente y coordinador en el ámbito académico y su reciente contribución literaria al debate político y social del país, consolidan su figura como una de pensamiento y acción.
La postulación de González por la MUD y la posible aceptación de su candidatura por el CNE, según indica el periodista especializado Eugenio Martínez, marcan un capítulo inesperado en la carrera hacia las presidenciales. Su designación como «candidato tapa» o “cuida puesto” sugiere una estrategia de la oposición por salvaguardar la viabilidad de su participación en el proceso electoral, en un contexto marcado por controversias y desafíos para las figuras opositoras.