En medio de desafíos globales, la OTAN refuerza su compromiso con la seguridad transatlántica en su 75 aniversario.
Este jueves 4 de abril de 2024, la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) marcó un hito histórico celebrando 75 años desde su fundación. En una ceremonia simbólica llevada a cabo en Bruselas, corazón político de Europa, los ministros de Relaciones Exteriores de los 32 países miembros se reunieron no solo para conmemorar los logros de este poderoso bloque militar, sino también para reafirmar su compromiso con la unidad y la cooperación transatlántica, aspectos más relevantes que nunca ante las crecientes amenazas globales.
En un acto que combinó la solemnidad con el espíritu de camaradería, los asistentes pronunciaron discursos que, si bien celebraban el pasado, estaban firmemente anclados en las preocupaciones del presente y las expectativas del futuro. La ceremonia, que incluyó el corte de un pastel conmemorativo, simbolizó la fortaleza y la cohesión de la alianza, reflejando la convicción de que, juntos, sus miembros son capaces de enfrentar cualquier desafío.
El secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, destacó la esencialidad de la cooperación transatlántica en su discurso, subrayando la interdependencia entre Europa y Estados Unidos en términos de seguridad y defensa. «No creo en Estados Unidos en solitario, de la misma forma en que no creo en una Europa en solitario. Creo en Estados Unidos y Europa juntos en la OTAN, porque juntos somos más fuertes y estamos más seguros», enfatizó Stoltenberg.
Su mensaje resaltó la importancia de esta alianza no solo para la defensa mutua, sino como un pilar de influencia diplomática y poderío internacional. En palabras de Stoltenberg, Europa necesita a Estados Unidos para asegurar su seguridad, mientras que Estados Unidos se beneficia enormemente de la vasta red de inteligencia y la influencia diplomática que los países europeos aportan.
«A través de la OTAN, Estados Unidos tiene más amigos y más aliados que cualquier otro gran poder en el mundo», afirmó el secretario general, recordando a los presentes y al mundo entero que la unidad y la cooperación transatlántica son fundamentales para enfrentar las amenazas y desafíos del siglo XXI.