El exgeneral Clíver Alcalá enfrenta una condena de 21 años y dos tercios en Estados Unidos por su vinculación con las FARC, marcando un precedente en los casos contra el círculo de Maduro.
Clíver Alcalá, un exgeneral vinculado a Hugo Chávez, fue condenado a 21 años y dos tercios de prisión por su implicación en el suministro de armas a las FARC. Este lunes, la sentencia fue dictada por el juez federal Alvin Hellerstein en Manhattan, poniendo fin a un capítulo en la larga saga de acusaciones que pesan sobre figuras cercanas al gobierno venezolano.
Alcalá, de 62 años, se había declarado culpable en junio de dos cargos graves: suministro de apoyo material a un grupo terrorista y transferencia ilícita de armas de fuego. A pesar de que las FARC se disolvieron oficialmente en 2016, tras un acuerdo de paz con Colombia, Estados Unidos aún las considera una organización terrorista.
La condena de Alcalá no solo refleja la seriedad con la que la justicia estadounidense aborda estos casos sino que también lo posiciona como el primero de cinco coacusados, incluyendo al actual presidente venezolano Nicolás Maduro, en enfrentar una sentencia en Estados Unidos por «narcoterrorismo». Maduro, por su parte, ha rechazado todas las acusaciones en su contra.
Los fiscales federales argumentaron que Alcalá, además de armar a las FARC, recibió millones de dólares en sobornos a cambio de asegurar la protección de los envíos de cocaína del grupo contra interferencias militares venezolanas. Por ello, habían propuesto inicialmente una condena de 30 años.
Sin embargo, la defensa solicitó clemencia, señalando que Alcalá operaba bajo las órdenes de Chávez y negaba cualquier participación en el narcotráfico. Subrayaron la ruptura de Alcalá con el gobierno de Maduro en 2013 y su posterior intento fallido de derrocar a Maduro desde Colombia en 2020, como factores a considerar para una sentencia más leve.