El presidente Joe Biden enfrenta oposición tanto de republicanos como de algunos demócratas tras su ultimátum sobre el uso de armamento estadounidense en Rafah.
El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, se encuentra bajo fuego cruzado por parte de legisladores tanto republicanos como demócratas tras su reciente ultimátum de que una gran ofensiva israelí en la ciudad de Rafah podría resultar en la suspensión del suministro de algunas armas estadounidenses. Esta declaración pública ha desatado una oleada de críticas y ha marcado un punto de inflexión en las relaciones entre Estados Unidos e Israel desde el inicio del conflicto de siete meses entre Israel y Hamas en octubre.
En una entrevista con Erin Burnett de CNN, Biden expresó que Estados Unidos no proporcionaría las armas que históricamente se han utilizado para operaciones en ciudades como Rafah si Israel decide avanzar. Esta declaración ha generado preocupación entre algunos miembros del Partido Republicano como JD Vance de Ohio y Lindsey Graham de Carolina del Sur, quienes han calificado la decisión como «la peor en la historia de las relaciones entre Estados Unidos e Israel».
Los demócratas no se quedaron atrás en las críticas. Un grupo de 26 demócratas de la Cámara de Representantes expresó su preocupación por el mensaje que esta decisión envía a Hamas y otros actores respaldados por Irán, y solicitó una sesión informativa de la Casa Blanca para obtener más detalles sobre esta política.
El secretario de Estado Antony Blinken también intervino, señalando en «Face the Nation» de CBS que, aunque Israel tiene procedimientos para minimizar daños a civiles, estos no se aplicaron de manera consistente y efectiva en Gaza. Blinken reconoció que más civiles han sido afectados por las acciones israelíes que por las de Hamas, lo cual subraya la gravedad de la situación.
A pesar de las críticas, algunos demócratas como Chris Murphy de Connecticut han defendido la posición de Biden, argumentando que el presidente está aprendiendo de los errores de las campañas militares estadounidenses en Irak y Afganistán, donde se demostró que no se puede derrotar a un movimiento terrorista únicamente con acciones militares.
(Con información de CNN)