NICHOLS

EE.UU. condena represión poselectoral en Venezuela

Brian Nichols denuncia la detención masiva de venezolanos como un acto de debilidad, mientras el canciller Yván Gil defiende las acciones del gobierno.

La tensión diplomática entre Venezuela y Estados Unidos alcanzó un nuevo pico este jueves, cuando el subsecretario de Estado para Asuntos del Hemisferio Occidental, Brian Nichols, condenó enérgicamente la detención de miles de venezolanos durante las protestas poselectorales. Nichols utilizó su cuenta de X (anteriormente Twitter) para denunciar la represión ejercida por el gobierno de Nicolás Maduro, afirmando que no es «una señal de fortaleza» sino más bien un acto desesperado por silenciar a la oposición.

«(Nicolás) Maduro y su equipo han arrestado a miles de venezolanos desde el 28 de julio por ejercer sus derechos fundamentales. Esta represión no es un camino sostenible, ni tampoco una señal de fortaleza», escribió Nichols, en un mensaje que rápidamente generó reacciones en la comunidad internacional.

El subsecretario de Estado dejó claro que, pese a los intentos del régimen por sofocar la disidencia, «las voces de los votantes venezolanos no serán silenciadas por la represión, la censura o la desinformación». Nichols también advirtió que «el mundo está observando», sugiriendo que la comunidad internacional no permanecerá indiferente ante las violaciones de derechos humanos en Venezuela.

La respuesta del gobierno venezolano no se hizo esperar. El canciller Yván Gil, en un mensaje igualmente en X, desestimó las acusaciones de Nichols, calificando a Estados Unidos como los «promotores de la violencia y el golpe de Estado» en Venezuela. Gil se dirigió al subsecretario con una serie de preguntas retóricas, cuestionando a quiénes se refería con «perseguidos políticos».

«¿Los comanditos del Tren del Llano? ¿Quiénes persiguieron y golpearon chavistas inocentes? ¿Los que quemaron escuelas y hospitales? ¿Aquellos que rociaron con gasolina a personas para quemarlas vivas? ¿Los que quemaron más de 300 módulos policiales? ¿Quiénes dispararon, para asesinar funcionarios de la Guardia Nacional Bolivariana? ¿A quienes llaman a un golpe de Estado y desconocen las instituciones?», interrogó el canciller, en un intento por justificar las detenciones masivas como parte de una lucha contra el crimen y el golpismo.

Gil también advirtió que «el crimen no paga» y que «las bandas criminales serán llevadas a la justicia», sugiriendo que las detenciones están dirigidas contra elementos criminales y no contra manifestantes pacíficos.