El gobierno de Lacalle Pou se adhiere a la denuncia ante la CPI por crímenes de lesa humanidad en Venezuela, aportando nuevos hechos desde 2020.
En un movimiento que ha generado fuerte debate en la región, el gobierno uruguayo de Luis Lacalle Pou decidió este lunes unirse a la denuncia presentada en 2018 por Argentina, Canadá, Colombia, Chile, Paraguay y Perú ante la Corte Penal Internacional (CPI) por presuntos crímenes de lesa humanidad cometidos por el régimen chavista en Venezuela. Según el diario El País, Uruguay no solo se suma a esta denuncia, sino que también “aportará nuevos hechos” ante la corte, centrados en las violaciones de derechos humanos ocurridas desde 2020.
El impulso para esta medida provino del senador Javier García, quien en la Comisión de Asuntos Internacionales de la cámara alta propuso que Uruguay se adhiriera a la denuncia, que está siendo “instrumentada” por el canciller Omar Paganini. «Hay práctica serial de ejecuciones, desapariciones forzadas y torturas sistemáticas», afirmó García en su cuenta de X (anteriormente Twitter), tras elevar su propuesta.
El senador del Partido Nacional entregó al fiscal de la CPI, Karim Khan, un documento con «nuevas circunstancias sobre la situación en Venezuela», que incluye datos sobre “asesinatos, desapariciones forzadas y detenciones por motivos políticos” ocurridas en los últimos tres años. Esta acción se enmarca en un contexto donde la situación en Venezuela sigue siendo un tema de intenso debate político en Uruguay.
El candidato presidencial del Frente Amplio, Yamandú Orsi, no tardó en reaccionar a la postura adoptada por el gobierno uruguayo. Con ironía, señaló que en la próxima Asamblea General de la ONU, Uruguay denunciará a Venezuela como una dictadura que viola derechos humanos. Ante estos comentarios, el presidente Lacalle Pou respondió con sarcasmo: «Alguien tiembla seguro», agregando que «los que tiemblan son los que tienen que tener determinada posición porque les deben muchas cosas».