El presidente ucraniano visita Washington y Nueva York para asegurar el respaldo de Biden y atraer la atención de los candidatos presidenciales de EE. UU.
El presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, llegó a Estados Unidos con una misión crucial: presentar su «plan de la victoria» a sus aliados y asegurar el respaldo continuo en la guerra contra Rusia. Zelenski se reunirá con Joe Biden el jueves, donde intentará persuadir al mandatario estadounidense para que autorice el uso de armas de largo alcance contra objetivos en territorio ruso, algo que Kyiv ha estado solicitando sin éxito.
«Llegamos a Estados Unidos de América», publicó Zelenski en redes sociales, dejando claro que este viaje tiene como objetivo mostrar el «plan de la victoria de Ucrania». Además, el mandatario ucraniano aprovechará su visita para reunirse con figuras clave de la política estadounidense, como la vicepresidenta Kamala Harris y el expresidente Donald Trump.
La reunión con Trump es especialmente importante para Zelenski, dado que el expresidente ha prometido que, de ganar las elecciones en noviembre, pondría fin a la guerra. Sin embargo, Trump y muchos republicanos han sido críticos con los paquetes de ayuda que Washington ha enviado a Kyiv, por lo que el líder ucraniano busca influir en su visión.
El contexto de esta visita es complejo: mientras Moscú avanza en el este de Ucrania, las fuerzas de Kyiv han logrado contraofensivas exitosas en la región rusa de Kursk. Sin embargo, Zelenski ha advertido que este otoño será decisivo para la guerra, y las próximas semanas definirán cómo terminarán más de 30 meses de conflicto.
Durante su estancia en EE. UU., Zelenski también visitó una fábrica de municiones en Pensilvania, agradeciendo a los empleados que fabrican los proyectiles de artillería utilizados por el ejército ucraniano. «Es en este tipo de lugares donde realmente se puede sentir que el mundo democrático puede prevalecer», dijo Zelenski.
Con las elecciones presidenciales estadounidenses en el horizonte, esta gira es clave para Ucrania, pues tanto Harris como Trump tienen posturas diferentes sobre el apoyo a Kyiv. Mientras la demócrata ha prometido continuar las políticas de Biden, Trump ha criticado el gasto masivo en la guerra, lo que pone en juego el futuro de la ayuda militar a Ucrania.