La comunidad internacional exige suspender esa constituyente. EEUU sancionó a la presidenta del CNE y otros funcionarios y amenaza con más sanciones.
Pese a la censura y presión contra los medios audiovisuales, lo que trasciende indica que todo está en contra del proyecto de una Asamblea Nacional Constituyente (ANC), cuyos 545 integrantes serían designados este domingo 30 de julio.
Aparte del rechazo creciente de la gente comun, el acoso gubernamental a los empleados públicos, las amenazas a las comunidades que reciben bolsas de comida aunque las pagan y la descomunal campaña electoral las 24 horas en radio y televisión, no parecen convencer a los votantes. Gremios, sindicatos, colegios profesionales, universidades autónomas y la comunidad internacional, piden suspender lo que consideran un proyecto ilegal, inoportuno y una amenaza para la legalidad y la democracia en Venezuela y en todo el continente.
El Poder Ejecutivo actúa como si ya estuvieran anulados por la ANC el Poder Legislativo, el Ministerio Público y el propio Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) porque el Servicio Bolivariano de Inteligencia (Sebin) sigue sin acatar la orden del TSJ de enviar a su casa al diputado regional de Barinas, Wilmer Azuaje.
La constituyente, de entrada, tiene dos caras: Una cara es que se instale este domingo 30 y anule a los demás poderes constituidos, incluyendo al Poder Ejecutivo. De esos 545 constituyentes puede salir cualquier cosa. Algunas buenas y otras malas. La otra cara, como asoman algunos analistas, es que Maduro haya caído en su propia trampa y con o sin ANC, saldrá de escena, a pesar de su incondicionalidad con Cuba.
El economista Gerver Torres, quien fue Consultor del Banco Mundial, del Banco Interamericano de Desarrollo, de las Naciones Unidas y de otras organizaciones multilaterales, director del Fondo Monetario Internacional, ministro Presidente del Fondo de Inversiones de Venezuela y Gobernador ante el Fondo OPEP y ante el Fondo Internacional para el Desarrollo Agrícola, autor del libro “Un Sueño para Venezuela”, es uno de los que asoman que Nicolás Maduro está ahora en la disyuntiva: si la hace se hunde y si no la hace también. No es la primera vez que alguien cae en su propia trampa.
Agrega que si Maduro logra hacer su Constituyente, el mundo se le vendrá encima y las presiones interna y externa se reforzarán mutuamente.
Si hay constituyente
Empecemos por explorar lo que pasaría si la hace. Internacionalmente, su aislamiento -ya extremo- se acentuaría. Ese aislamiento que hasta hoy es básicamente político y declarativo, se convertiría en acciones diplomáticas y económicas de la comunidad internacional, con graves repercusiones para la estabilidad y supervivencia del régimen. Los países de la región están considerando entre otras medidas no reconocer dicha Asamblea, ni lo que surja de ella. Un eventual gobierno que emane de allí, así sea el mismo de Maduro, padecería esa suerte: desconocimiento internacional.
Esos gobiernos estarían considerando también retirar sus embajadores de Venezuela, e igualmente la aplicación de otras sanciones, incluyendo económicas. La suspensión de la compra de petróleo, o la calificación de PDVSA como empresa criminal podrían ocurrir, como decisiones regionales.
Así, con la elección de la Constituyente, lo que hasta ahora el régimen ha querido presentar -a nivel internacional- como básicamente un conflicto con los Estados Unidos, se transformaría más clara y abiertamente como un enfrentamiento con todo el continente. Ello por no mencionar otras regiones como la Unión Europea. El desconocimiento del régimen como gobierno legítimo por parte de la comunidad internacional, le haría más difícil aun la obtención de financiamiento externo, aun cuando sea de países como China.
En el plano interno, la instalación de una constituyente traería también serias complicaciones para el régimen. Quien la presida será de facto el nuevo presidente del país; o al menos, otro presidente.
En los tiempos de Chávez, la Constituyente del momento estaba totalmente subordinada a él. Chávez no enfrentaba peligro alguno de rivalidad en el liderazgo. Tenía el gobierno y la constituyente bajo su control. Ese no es el caso de Maduro. Su precario liderazgo en el seno de su partido y de sus propios seguidores se debilitaría más aún. Por lo tanto, el país podría terminar con dos presidentes y dos gobiernos, que muy pronto podrían estar enfrentados. Pero, como las fuerzas democráticas están en el proceso de constituir también un nuevo gobierno, podrían ser no dos, sino tres, los gobiernos que el país tuviese en corto plazo. Este último gobierno sería el que tendría reconocimiento internacional. El poder de Maduro -ya muy precario- estaría más diluido que nunca. Gerver Torres también plantea que esa ANC no dará a Maduro más poder del que ya tiene.
Las dificultades
Hasta el jueves, el proyecto de la ANC seguía adelante. El Consejo Nacional Electoral (CNE) seguía saltando reglas y normas para que lo que se le complica hora a hora pueda concluir con la designación, no elección, de los integrantes de la ANC.
El diario español El País analizó el domingo pasado lo que ocurre en Venezuela con esta constituyente y mostró parte de sus irregularidades. Explicó que en las “bases comiciales” impuestas por el presidente Nicolás Maduro y aceptadas sin ninguna observación por el CNE, se desechan los circuitos electorales tradicionales y se adopta la paridad de un diputado “territorial” por municipio, sin importar la población de la circunscripción. Con ello, otorga una ventaja desproporcional a las zonas rurales, donde el oficialismo conserva cierto apoyo y tiene mayor poder para presionar a los electores. Así, por ejemplo, un voto en el estado de Falcón, una provincia semi rural del noroeste de Venezuela, “vale” 26 veces más que uno en Caracas, fuertemente antichavista. Además, la definición de los denominados “sectores” sigue unos criterios brumosos que, en todo caso, se alinean con los ámbitos de acción de las misiones sociales del Gobierno, cuando no se trata de agrupaciones abiertamente progubernamentales, como las comunas. La introducción del “ámbito sectorial” corporativo también conduce a que alrededor de 70% de los electores puedan votar por dos cargos, mientras uno de cada tres solo lo hará por uno.
El País de España plantea que una asistencia a las urnas menor al 25% del padrón electoral (con un total de 19 millones de votantes) o menor a los 7,5 millones de participantes que la oposición dice haber convocado para su consulta popular oficiosa del 16 de julio, representaría un revés político para el Gobierno y restaría legitimidad a la Asamblea. Por eso el oficialismo pone todos sus recursos en asegurarse que haya votantes ese día. Presiona a los empleados públicos y promete controlar, mediante el llamado “Carnet de la Patria”, la asistencia de los beneficiarios de sus programas sociales a los centros de votación. Además cuenta con la complicidad del Consejo Nacional Electoral (CNE), que domina. El CNE recientemente aprobó que los electores que se sientan amenazados por la violencia opositora en sus centros de votación, podrán acudir a otras mesas; a la vez, hizo prácticamente imposible votar en blanco en el dispositivo electrónico.
A propósito del Carnet de la Patria, que puede ser obtenido hasta el sábado 29 en la medida que el gobierno presiona a las comunidades, un video en las redes sociales muestra que cada carnet tiene dos seriales y al final vale por dos votantes.
Además alertan que en su parte posterior tiene un código QR (código de respuesta rápida por sus iniciales en inglés), una evolución del código de barras que permite el almacenamiento y lectura de una lista de información ilimitada según su requerimiento, especialmente sobre beneficios recibidos por el gobierno, militancia en partidos políticos, si forman parte de las familias que reciben alimentos subsidiados por el Estado y sobre sus redes sociales.
Irregularidades
La ANC arrancó con muchas irregularidades y cada semana ha acumulado otras que incluyen la ubicación de decenas de centros electorales en el Poliedro de Caracas para evitar el asedio opositor.
Al respecto, la ONG Súmate denunció que la constitución de Centros y Mesas de Votación de “contingencia”, supuestamente para garantizar el derecho al sufragio, viola explícitamente el ejercicio libre y secreto del voto, que el artículo 63 de la Constitución estipula como dos de las cuatro condiciones principales que contiene este derecho: “…Se ejercerá mediante votaciones libres, universales, directas y secretas…”, además de favorecer la coacción e intimidación y saber por quiénes votarán los que se movilizan a esos centros y mesas de votación de contingencia, lo cual podría quebrantar el principio “Un elector, un voto”, porque es una ventana para la votación múltiple de un mismo elector.
Súmate también denunció que la mayoría del Directorio del CNE ha convocado y realiza la elección de la ANC al margen de la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela y las leyes electorales, sustrayendo este proceso del ordenamiento jurídico nacional, lo cual implica la nulidad total del mismo, de acuerdo con lo dispuesto en los artículos 1, 2, 3, 215 y 216 de la Ley Orgánica de Procesos Electorales (LOPRE).
La ONG agrega que a esta última decisión se suman una serie de “…etapas, actos y actuaciones…” en todo este proceso electoral, de acuerdo con lo establecido en la Ley Orgánica de Procesos Electorales (artículo 42), que las cuatro rectoras del CNE han omitido o acometido como es el caso de la supresión de la publicación del Registro Electoral Preliminar y la fase de impugnaciones y resoluciones de las demandas ciudadanas sobre el mismo, y haber decidido adelantar otras actividades sin la aprobación previa de la Convocatoria Oficial y la Publicación del Cronograma de esta elección, entre ellas haber iniciado la etapa de las pre-postulaciones de candidatos a integrar la ANC, que los artículos 35 y 40 de la LOPRE exigen que se haga posterior a las publicaciones del Registro Preliminar y del Registro Definitivo.
Otra de las graves violaciones en la organización de la elección de la ANC, según Súmate, es que en el Cronograma Electoral de la ANC, contenido en la Resolución Nº 170607-119 de fecha 7 de junio de 2017 publicada en Gaceta Electoral Nº 848 del 7 de junio de 2017, está indicado que el Registro Electoral para la elección de los integrantes de la ANC corresponde al corte del 30 de abril de 2017, con lo cual la mayoría del directorio del CNE también se saltó lo dispuesto en el artículo 35 de la LOPRE que obliga que la fecha del Registro Electoral sea posterior a la fecha de la convocatoria del proceso electoral: “A los efectos de la celebración de un proceso electoral, el Consejo Nacional Electoral tomará como Registro Electoral Preliminar, el corte de la data arrojada por el Registro Electoral publicado dentro de los treinta días siguientes a la convocatoria del proceso…”.
Ante estas pruebas, entre otras muchas más, de la violación de los derechos constitucionales al sufragio y a la participación, que demuestran cómo realizan el proceso de elección de la ANC al margen del marco regulatorio de las leyes electorales, Súmate solicita a la Fiscalía General de la República abrir una investigación penal en contra de las 4 rectoras del CNE, acorde con lo estipulado en los artículos 25 y 29 de la Constitución, como también exhorta a los magistrados de la Sala Electoral del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) a actuar y proceder a la suspensión definitiva de esta elección, ya que el resultado de la misma será nulo de toda nulidad.
Rechazo internacional
Por eso y porque no resolverá la crisis venezolana, la comunidad internacional ha emitido varios pronunciamientos.
El pasado viernes, Mercosur realizó su cumbre semestral en la ciudad de Mendoza, Argentina, desde donde pidió a la suspendida Venezuela buscar una solución a su crisis política y social. Este jueves seguían esperando respuesta del gobierno venezolano.
El miércoles, la Unión Europea (UE) instó al Gobierno de Venezuela a respetar la Constitución del país y advirtió al presidente, Nicolás Maduro, que la elección de la Asamblea Constituyente incrementará el riesgo de confrontación.
La UE dijo: “Para la sociedad venezolana la convocatoria de una Asamblea Constituyente es una medida controvertida, por ello se corre el riesgo de que polarice más al país y aumente el peligro de confrontación”.
Ese mismo día, un grupo de 13 países de la Organización de los Estados Americanos (OEA), liderados por EEUU y México, y su secretario general, Luis Almagro, exigieron a Venezuela que suspenda la Asamblea Constituyente porque “implicaría el desmantelamiento definitivo de la institucionalidad democrática” y “sería contrario a la voluntad popular expresada en la consulta del 16 de julio”.
Ese mismo miércoles, el gobierno de EEUU sancionó a Tibisay Lucena, presidenta del CNE, y a otros 12 funcionarios y ex funcionarios del gobierno de Maduro como medida de presión por el proyecto de la constituyente y amenazó con sancionar a quienes resulten integrantes de la ANC.
Se trata de sanciones de carácter económico, individuales, y no en contra del pueblo venezolano, por estar incursos en delitos de corrupción y contra la democracia.
Entre los sancionados también está Elías Jaua, jefe de la Comisión Presidencial para la Constituyente; Néstor Reverol, ministro de Interior, Justicia y Paz; Tareck William Saab, Defensor del Pueblo, y Carlos Malpica Flores, Tesorero de la Nación y sobrino de la primera dama y candidata a la constituyente, Cilia Flores.
También aparecen Jesús Suárez Chourio, comandante general del Ejército; Iris Varela, ex ministra de Prisiones; Carlos Pérez, director nacional de la Policía Nacional Bolivariana (PNB); Sergio Rivero Marcano, comandante general de la Guardia Nacional Bolivariana; Rocco Albisinni Serrano, presidente del Cencoex; Alejandro Fleming, Viceministro de Europa del Ministerio de Relaciones Exteriores de Venezuela; Franklin García, ex director de la PNB y Simón Zerpa, vicepresidente de Finanzas de PDVSA.
La oposición llamó a un paro nacional de actividades durante el miércoles y el jueves exigiendo la suspensión de la ANC. El paro tuvo buena receptividad en todo el país. Igualmente anunció nuevas acciones para el resto de los días incluyendo el día de la escogencia de los constituyentes. Simultáneamente y por parte del gobierno, el jueves fue el cierre de la campaña electoral, a todo trapo en Caracas.