***Un gran alboroto ha generado un proyecto de ley del Grupo Socialista, porque se interpreta como una prohibición a la producción pornográfica en España.
Una proposición de ley del Grupo Socialista que busca abolir la prostitución ha generado gran polémica en la última semana por su confusa redacción. Entre otras cosas, porque se interpreta que supondría la prohibición de la producción de pornofgrafía en España.. Voces del sector del porno critican la medida y alertan de que tendría un importante impacto a nivel nacional.
Si lo que se pretende lograr es limitar la creación o acceso a la pornografía, la medida sería «absolutamente absurda. La producción española es solo un 3% de la que se puede llegar a consumir», que se hace muy mayoritariamente en Estados Unidos y Budapest (Hungría). «No se pueden cerrar los millones y millones de páginas web que hay y pensar que se soluciona algo acabando con lo que hacemos aquí». Dijo Juli Simón, director del Salón Erótico de Barcelona, quien aclara que nuevas plataformas como Onlyfans han acabado con las grandes productoras de porno en España. «El 90% de las artistas españolas explotan sus contenidos en estas plataformas«.
De hecho, consultado por las cifras que puede mover el sector de la pornografía en España, revela que oficialmente no las hay. «Se trata de algo fuera del sistema. La Sociedad General de Autores y Editores (SGAE) no reconoce a los artistas porno, la de Productoras no reconoce a las productoras porno».
Retomando las plataformas digitales, que incluyen webcams en directo, calcula que debe haber unas «300 artistas que recurren a ellas. Con esta prohibición, se va a atacar a estos creadores de contenidos o influencers«.
Por su parte Silvia Rubí, indicó desde el Salón Erótico de Oporto, en el que participa que «Lo único que haría esta ley es coartarnos la libertad de creación. Llegaría incluso a afectar a las editoriales. Si quiero escribir mis memorias, hablaría de pornografía, con contenido sexual y explícito. ¿Esto también lo van a prohibir?».
Sigue con esta argumentación: «Esto supone, más bien, recortar las libertades sexuales de las personas en España. Sobre todo de las mujeres. Prohibir que nos podamos autoproducir es jodido«.
Rubí considera que la redacción del proyecto de ley es «un poco chapucera. La propuesta es demasiado amplia: incluye revistas editoriales, exposiciones, fotografías… También las ‘cams’. No sé cómo entraría la ley en esto». En el sector erótico «hay temor por cómo puede acabar esto».
Incluso estrellas del ‘porno’ ya retiradas lo ven así. Este es el caso de Nacho Vidal. La ex estrella de la pornografía española, que ha sido tanto actor como productor durante varias décadas, no entiende la propuesta del Grupo Socialista en el Congreso de los Diputados.
«No entiendo la pérdida de energía, tiempo y lógica de esta ley. Es algo absurdo y no tiene lógica», afirma, y recuerda que al ser una actividad legal genera ingresos públicos. «Yo habré pagado algún millón que otro en impuestos«.
Va más allá: «Hasta el presidente del Gobierno se la ha machacado viendo pornografía. Cumplimos una función social para que todo el mundo se masturbe, y ahora se nos quiere prohibir», afirma.
Silvia Rubí critica también el objetivo de abolir la prostitución, y cómo se pretende hacer. «Me parece horroroso. Perseguir a los clientes también es terrible, así como prohibir la publicidad. Nos obligaría a trabajar para terceros. No se ha contado con quienes trabajamos en esto para diseñar la legislación». Y aclara: «No veo mal una regulación sobre cómo se llega al porno, pero sí sobre el porno«.
Por su parte el Grupo Socialista ha intentado rebajar la tensión asegurando que tratar el tema de la industria del porno está descartado para el proyecto de ley, ya que su objetivo es actuar contra la trata con fines de explotación sexual y contra el ejercicio de la prostitución en el país.