El gobierno colombiano acusa al ELN del secuestro, mientras que la guerrilla aún no confirma ni desmiente la información.
El padre del futbolista del Liverpool, Luis Díaz, fue secuestrado el pasado sábado en Barrancas, La Guajira. El Gobierno colombiano, por medio de Otty Patiño, jefe de la delegación en las negociaciones de paz, señaló al Ejército de Liberación Nacional (ELN) como responsable de este secuestro. Sin embargo, hasta el momento, la guerrilla no ha confirmado ni desmentido dicha acusación.
De acuerdo a fuentes internas del ELN, las declaraciones del Gobierno les han tomado por sorpresa. La guerrilla ha expresado que realizará las debidas verificaciones internas para determinar si alguno de sus frentes tiene en su poder al padre del futbolista y que se pronunciarán oficialmente al respecto una vez concluida esta investigación.
El secuestro ha despertado la preocupación y el rechazo de la comunidad internacional y de las autoridades colombianas. Patiño, en un comunicado, exigió al ELN la liberación inmediata de Luis Manuel Díaz y subrayó que garantizar su vida e integridad es responsabilidad total de la guerrilla. Además, recordó que el secuestro es una práctica criminal y una violación al Derecho Internacional Humanitario.
Actualmente, Gobierno y ELN mantienen un cese al fuego bilateral desde el 3 de agosto. Este acuerdo prohíbe acciones ofensivas entre ambas partes y acciones que violen el DIH, lo que incluiría el secuestro de civiles, considerado un crimen de guerra.
A pesar de este cese al fuego, tensiones previas ya habían sido señaladas por el ELN. Aureliano Carbonell, negociador del grupo guerrillero, mencionó que el cese «está en crisis» debido a un ataque militar y la presencia paramilitar en zonas donde el ELN opera. Estas tensiones ponen en riesgo la continuidad del acuerdo de cese al fuego y del proceso de paz en el país