El exalcalde de Nueva York y abogado de Donald Trump, Rudy Giuliani, afronta problemas financieros tras ser condenado a pagar $148 millones.
Rudy Giuliani, exalcalde de Nueva York y abogado personal del expresidente estadounidense Donald Trump, se ha declarado en bancarrota este jueves en un tribunal de Nueva York. Esta declaración surge tras ser condenado el viernes pasado a pagar $148 millones a dos trabajadoras electorales de Georgia por difamación.
Según informes de medios estadounidenses, Giuliani declaró activos estimados entre $1 millón y $10 millones, mientras que sus deudas se calculan entre $100 millones y $500 millones. El exalcalde fue condenado la semana pasada por acusar falsamente de fraude a dos trabajadoras electorales en el contexto de las elecciones presidenciales de 2020, en las que Trump fue derrotado por el actual mandatario Joe Biden.
Giuliani, que enfrenta problemas financieros desde hace tiempo, aún no ha abonado la multa de $200.000 impuesta por las autoridades en agosto por el mismo caso. Su asesor político, Ted Goodman, defendió en un comunicado recogido por The New York Times que la bancarrota «no debería sorprender a nadie» y afirmó que esta decisión le dará tiempo para apelar la sentencia judicial. Giuliani ha argumentado que su conducta está protegida por la libertad de expresión.
Además, Giuliani está implicado en dos procesos judiciales relacionados con los intentos de Trump de revertir el resultado de las elecciones de 2020, uno en un tribunal federal de Washington y otro estatal en Georgia. En este último, está acusado de ser cómplice de Trump en la trama criminal. Según reportes, Giuliani habría solicitado sin éxito ayuda financiera a Trump para cubrir los costos de sus procesos legales.