En una ceremonia conmemorativa, Rafael Poleo fue honrado por su dedicación a la libertad de expresión y su rol en el periodismo venezolano, marcando el 50 aniversario de la revista Zeta.
El 25 de abril se convirtió en una fecha histórica para Rafael Poleo, destacado periodista venezolano y fundador de la revista Zeta, quien fue honrado en Miami por su destacada trayectoria y su incansable lucha por la democracia y la libertad de expresión. La ceremonia, que coincidió con el 50 aniversario de la revista Zeta, contó con la presencia de amigos, familiares y varios representantes de funcionarios locales.
En un gesto significativo, la Comisionada de Miami-Dade, Eileen Higgins, declaró el 25 de abril como el «Día de Rafael Poleo», en reconocimiento a su contribución al periodismo y a su valiente lucha en favor de la democracia en Venezuela. Adicionalmente, la oficina del Congresista Carlos Gimenez le entregó un Record del Congreso, donde se destaca su defensa de la libertad de expresión.
La ciudad de Miami y el Comisionado Manolo Reyes también entregaron reconocimientos a Poleo, subrayando la importancia de su labor periodística a través de la Revista Zeta. Visiblemente emocionado, Poleo agradeció los honores recibidos y compartió el momento con dos de sus hijos, Francisco y Helena, así como con amigos cercanos y colegas.
Helena Poleo, expresando su orgullo y gratitud, destacó la relevancia del evento: «Es un honor poder acompañar a mi papá en esta fecha histórica y estaré siempre agradecida con los líderes locales que reconocen la difícil labor de luchar por la libertad de expresión en un país como Venezuela».
«A pesar de la persecución del régimen contra nuestra familia, seguimos luchando, y tanto Zeta como El Nuevo País continúan en el mundo online, donde seguiremos hasta poder regresar a nuestro país y poner a andar la rotativa una vez más», añadió Helena Poleo, enfatizando la resiliencia y el compromiso continuo de su familia hacia el periodismo independiente y crítico.
La ceremonia, celebrada en Miami, no solo fue un homenaje a la carrera de Rafael Poleo, sino también un recordatorio de la importancia vital de la libertad de prensa en el mantenimiento de sociedades democráticas y justas.