La tolda blanca denuncia la detención arbitraria de cinco de sus líderes, mientras crece la presión internacional por la liberación de Williams Dávila.
La creciente represión en Venezuela vuelve a estar en el centro del debate tras la denuncia de Acción Democrática en resistencia sobre la detención de cinco de sus dirigentes clave. En un país donde alzar la voz se ha convertido en un acto de valentía, la tolda blanca ha reclamado la liberación inmediata de sus líderes, subrayando que «defender la verdad no es delito».
A través de su cuenta en X (anteriormente conocida como Twitter), Acción Democrática exigió la libertad para Williams Dávila, Fernando Feo, Beatriz Andrade, Endrick Medina y José Camero, además de pedir justicia para todos los presos políticos en el país. «Defender la verdad no es delito», enfatizó el partido en su manifiesto digital.
Los casos de estos líderes opositores se han vuelto un símbolo de la lucha contra la represión en Venezuela. Dávila fue secuestrado el pasado 8 de agosto por individuos armados y sin identificación, mientras que Fernando Feo, alcalde de Tinaquillo, fue detenido forzosamente el 4 de agosto. Beatriz Andrade, concejal en Anzoátegui, fue arrestada el 7 de agosto, y Endrick Medina, quien es secretario de organización del partido en el municipio Torres de Lara, fue capturado el mismo día que Dávila. Finalmente, José Camero, secretario general de AD en Guárico, fue secuestrado el 3 de agosto por personas no identificadas.
La situación ha generado una ola de indignación no solo en Venezuela, sino también a nivel internacional. El canciller de Uruguay, Omar Paganini, se sumó al coro de voces que exigen la liberación de Williams Dávila, un líder opositor con una larga trayectoria política y exgobernador del Estado Mérida. Paganini utilizó su cuenta en X para condenar la represión del gobierno de Nicolás Maduro, señalando que «el régimen venezolano continúa persiguiendo, encarcelando y secuestrando a ciudadanos que piden democracia y exigen respeto a la voluntad popular expresada en las urnas».
Por su parte, el Gobierno de Portugal también ha alzado la voz en defensa de Dávila, exigiendo su liberación «inmediata e incondicional». En un comunicado oficial, el Gabinete del ministro de Estado y de Asuntos Exteriores de Portugal subrayó que están en «estrecho contacto» con otros Estados de la región europea y socios de la Unión Europea para analizar la delicada situación política en Venezuela.