El excandidato presidencial denuncia falta de imparcialidad y transparencia en el manejo de casos electorales en Venezuela
En medio de la creciente tensión política en Venezuela, el excandidato presidencial Enrique Márquez ha dado un paso audaz al presentar este martes una solicitud de recusación contra la presidente de la Sala Electoral del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ). Márquez argumenta que los «vínculos» de la magistrada con el Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV) comprometen gravemente su «imparcialidad» en los casos que se están tratando dentro del tribunal.
«Es inaceptable que un funcionario encargado de impartir justicia esté involucrado en actividades partidistas», señaló Márquez durante una rueda de prensa, enfatizando que su equipo ha presentado «pruebas contundentes» que demuestran estas conexiones políticas. Según el dirigente, estas pruebas ponen en entredicho la capacidad de la presidenta de la Sala Electoral para actuar de manera objetiva y justa.
Aunque el recurso fue formalmente recibido, Márquez expresó su preocupación por la falta de transparencia en el proceso, destacando que no se les otorgó un documento oficial que confirmara la recepción de la recusación. «Nuestro recurso no solo se fundamenta en la falta de imparcialidad, sino que también incluye una serie de denuncias relacionadas con el manejo irregular del proceso electoral», afirmó.
El político no se quedó ahí y detalló siete denuncias adicionales que acompañan su solicitud. Entre ellas, mencionó la «falta de acceso al expediente» por parte de su equipo legal, lo que, según él, ha impedido realizar las experticias necesarias para defender su caso. También destacó la «carencia de constancias escritas» sobre la recepción de tres documentos previamente entregados al tribunal, así como la «imposibilidad» de presentar testigos durante el desarrollo de las experticias.