Rami Abdel Rahman, director del Observatorio Sirio de Derechos Humanos (OSDH), informó que la explosión de un coche bomba cerca del tribunal islámico en Azaz, norte de Alepo, Siria, causó la muerte de 43 personas y dejó decenas de lesionados este sábado.
La agencia de noticias turca Dogan responsabilizó del atentado al autodenominado Estado Islámico (EI), quien ha encabezado numerosos ataques en Azaz.
Un portavoz detalló que al menos seis de las víctimas eran militares, mientras que el resto eran civiles. De igual forma, indicó que la cantidad de muertos podría aumentar por el estado de gravedad en el que se encuentran algunos de los heridos.
Un equipo de rescate se dirigió inmediatamente al lugar para socorrer a los lesionados. Cabe destacar que la explosión ocasionó, además, múltiples daños materiales.