El régimen se viste de cordero y en realidad es un lobo resabiado

Como la fábula griega de Esopo, este gobierno se viste con piel de cordero cuando en realidad es un lobo resabiado y mal intencionado.

Objetivos no claros; estrategias no compartidas; tácticas divergentes y falta de unidad de criterio al momento de la toma de decisiones, son algunos de los factores que han entorpecido las iniciativas que la comunidad internacional ha adelantado en favor de la restitución de la democracia en Venezuela. La gran pregunta en las cancillerías y en los encuentros presidenciales es cómo organizar las fuerzas de la oposición para que actúen coherentemente y se despojen de personalismos y protagonismos que han conducido a la decepción y a la falta de credibilidad en el liderazgo, tanto a nivel internacional como nacional.

Estas carencias han conducido a una falta de unidad, la cual ha colocado a los venezolanos ante el dilema de seguir votando, supuestamente para defender unos espacios que realmente representan una zona de confort para algunos dirigentes de la oposición. De “votar o no votar”, o incluso votar nulo. Por lo cual, al ser un dilema se dificulta decidirse, ya  que todas las formas conducen a la misma conclusión. El gobierno necesita hacer elecciones y más elecciones para legalizar su ilegitimidad de ejercicio ante el mundo, entendida esta cuando quien está en el poder no actúa de acuerdo al deber ser, a lo que señala el espíritu, propósito y razón del Estado de Derecho.

El gobierno ha sabido manipular las diversidades de criterio que existen dentro de los factores democráticos y explotarlos, colocando a la oposición en aceras diferentes que en nada contribuye a la Unidad Nacional en mayúscula, porque hacia allí es donde debería converger cualquier nuevo experimento que intente reagrupar a la oposición democrática, luego de la Coordinadora Democrática y la MUD. La Unidad Nacional dio con el traste con Pinochet en Chile y con la temible hermandad de las espadas en el Cono Sur. Pareciera que el problema no es la democracia sino una Unidad verdadera a escala nacional.

Luego de las elecciones regionales, el gobierno (ni tonto que fuera) convocó elecciones de alcaldes cuyo único fin es enrostrarle al mundo que en Venezuela sí se hacen elecciones. Pero lo que no dice es que se hacen a la medida; a lo cubano, a lo nicaragüense, ruso o chino; con los candidatos de oposición menos incomodos, con una reingeniería adecuada a sus necesidades políticas y circuitos electorales, al igual que si fuera un traje “pret a porter”, hecho a la medida por el CNE

En este contexto tenemos, por un lado, países decididos a hacer presión como EE.UU, Canadá y la Unión Europea de tomar medidas para impulsar un cambio democrático. Por otro, las principales cancillerías de América Latina agrupadas en el Grupo de Lima, que tratan de evitar un estallido que indudablemente les afectara a ellos. Mientras que la oposición, por una parte, sigue haciéndole el juego al gobierno con el diálogo sin negociar; y por la otra, el grupo está dispuesto a ir a República Dominica a …; y otro anuncia que no asistirá a dicho evento.