Dialogar no es sinónimo de entreguismo. El diálogo debe servir para que se abra el canal humanitario, se libere a los presos políticos y se respete la voluntad popular.
Desde el año 2002 comenzó la reorganización de nuestra estructura partidista y de nuestra maquinaria electoral con el lema “Adelante por Venezuela”. Nos dimos cita en un sector popular de Petare. Allí la fuerza de la gran maquinaria electoral de Acción Democrática estuvo presente en el sector la Cruz del Morro en Petare, estado Miranda, en el cual todos los adecos le ratificamos al país nuestro talante democrático, nuestro compromiso con el país y con el pueblo.
Acción Democrática es un partido policlasista, pero con mucho arraigo popular. Con este acto nuestro partido demostró que sí tiene maquinaria de carne y hueso, que ya estamos estructurados totalmente en todo el país y nuestra misión es salir a hablar con la gente, pese a que este gobierno abusa de su poder, humilla a la gente por una bolsa de comida, por medicina, vivienda y hasta fuente de empleo. No debemos perder la esperanza.
Desde allí se le explicó a los más de dos mil asistentes por qué nuestra organización política no participó en las elecciones municipales y por qué la necesidad del diálogo o negociación con el gobierno nacional. Nuestro secretario general Henry Ramos Allup, se dirigió a los asistentes y en casi dos horas trató de resumir su informe político. Entre sus aseveraciones “quien quiera ser candidato presidencial se tiene que contar y no vamos a aceptar ninguna trampa que intente anular este precepto. El país no quiere que le inventen un candidato”. Asimismo, aseguró que los que proponen una vía distinta a la electoral para lograr un cambio de Gobierno en el país lo hacen porque “no tienen votos” y cuando se le preguntó si esto era un acto de campaña, respondió “que los adecos desde el año 1941 siempre están en campaña.
Igualmente informó por qué Acción Democrática respaldaba el diálogo. Señores, en plena guerra, ambas partes en disputa se sientan a negociar para poner fin al conflicto; para llegar a un acuerdo con ciertas condiciones. Claro, entendemos la duda y la resistencia de la gente, ya que el año pasado nos sentamos y el Gobierno no cumplió nada de lo acordado, por ello la desconfianza de gran parte de los venezolanos. Este diálogo debe servir, junto a la ayuda internacional, para que se abra el canal humanitario, pues en nuestro país sí hay crisis humanitaria. No es mentira. En nuestro país no hay medicamentos. La gente se está muriendo porque no encuentra la medicina para tratar enfermedades crónicas. El diálogo debe servir para que se libere a los presos políticos encarcelados injustamente; para que se respete la voluntad popular de un pueblo al elegir sus diputados a la Asamblea Nacional; y para que cese el hostigamiento vía sentencia del TSJ hacia a la Asamblea Nacional. El diálogo es necesario.