Por Jaime Granda
Hay un gasto millonario internacional para la campaña del presidente Nicolás Maduro.
Mientras gastan millones en la campaña internacional para la reelección del presidente Nicolás Maduro, dicen que no hay dólares para importar comida, medicinas, repuestos ni para pagar a los acreedores que presionan con tribunales.
Los “chismes caza bobos”, como escribió alguien esta semana, las noticias falsas o fake news y los rumores en las redes sociales dominan la campaña de las elecciones presidenciales que deberían concluir el 20 de mayo en Venezuela.
Es innegable que lo que está pasando difícilmente puede ser entendido desde afuera y por personas que generalmente han sido indiferentes a la política. Los canales de televisión y las emisoras de radio contribuyen poco a precisar lo que realmente sucede.
La mayoría de la gente común está clara en que un gobierno que ha destruido los servicios públicos, destruido la producción nacional y ha convertido la importación de alimentos, medicinas, repuestos y todo lo que necesita un país para avanzar, en negocio político tiene pocas probabilidades de ser reelecto. La máxima es aceptada en todo el mundo: un gobierno con hiperinflación tiene pocas probabilidades de mantenerse.
Sin embargo, es a partir de esa realidad cuando comienzan las confusiones y los “chismes caza bobos” que parecen afectar a las cúpulas de los partidos que dicen querer salir del actual gobierno.
Solamente leyendo titulares de esta semana, cualquiera puede darse cuenta que el actual gobierno de Venezuela tiene graves problemas a corto plazo y eso debería afectar sus opciones en las elecciones del próximo 20 de mayo.
Aparte del mal estado de los servicios de electricidad, suministro de agua a los hogares, gas doméstico y la telefonía que incluye el servicio de Internet, el gobierno tiene complicaciones con quienes han sido sus socios en negocios de importación de comida, gasolina y otros productos, con sus socios en exportación de petróleo y sus derivados, al igual que otros minerales.
Frente a sus graves problemas de recursos monetarios, el gobierno lanzó el proyecto de la moneda virtual Petro, pero resulta que no ha solucionado nada y en la prensa del domingo pasado apareció la nota en la que el gobernador del estado Zulia, afectado por continuos y prolongados apagones, admitió que la minería de criptomonedas está afectando al sistema eléctrico de la zona.
Los titulares del jueves 10 de mayo destacaron que está en peligro la capacidad venezolana de vender petróleo ante diversas medidas de embargo que se tramitan en contra de PDVSA. Una de las demandas fue tramitada por una contratista canadiense que exige pago de más de 25 millones de dólares en tribunales de Nueva York.
La situación también afecta a embarcaciones que antes salían desde islas del Caribe hacia el resto del mundo después de procesar en las mismas el crudo que se exportaría. Ante el peligro de ser embargados, los barcos están ahora paralizados en las costas venezolanas. Algunos recordaron el viejo refrán de que barco parado no cobra flete.
Además, las instalaciones de PDVSA en todo el país están en situación calamitosa y la producción de crudos ya está cerca de menos de un millón de barriles por día. Fuentes expertas indican que el número de taladros petroleros activos se redujo a un nivel muy por debajo de los que funcionaban en 1990.
Otra acción fue iniciada por Rusoro Mining y la misma busca recuperar pago de 1.34 billones de dólares como compensación porque en 2012 el gobierno venezolano le expropió sus activos de oro.
A todo eso no hay que dejar fuera que el jueves 03 de mayo el Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) en el exilio declaró la suspensión de Nicolás Maduro como presidente de la República y lo inhabilitó para ejercer cargos públicos por estar incursos en pagos indebidos recibidos de la empresa brasileña constructora Odebrecht.
El Consejo Nacional Electoral (CNE) fue notificado por el TSJ en el exilio de las anunciadas decisiones. Luis Almagro, secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA), reconoció la inhabilitación y suspensión de Nicolás Maduro como gobernante de Venezuela. La medida también es reconocida por Europa y Estado Unidos y oficialmente el presidente Nicolás Maduro no podrá tramitar o gestionar nada ante organismos internacionales.
Por cierto que el presidente Nicolás Maduro dijo en su campaña electoral que después del 20 de mayo convocaría a otro diálogo con la oposición en República Dominicana y tal anuncio fue descartado por el presidente dominicano Danilo Medina.
Campaña dolarizada
A pesar de todo el panorama mostrado en líneas anteriores, el presidente Nicolás Maduro mantiene su proyecto de ser reelegido con la promesa de que después del 20 de mayo resolverá la crisis económica que él y sus colaboradores inmediatos han provocado.
La campaña consiste en ofrecer bonos especiales a todos aquellos que le garanticen su voto y se dejen chequear mediante el Carnet de la Patria.
Pero aparte del dinero criollo destinado a comprar votos, el presidente Nicolás Maduro y su comando de campaña, especialmente el grupo “Somos Venezuela”, están pagando propaganda electoral en diversos periódicos de Europa, Estados Unidos y América Latina.
No hay dólares para que los importadores de alimentos, medicinas, repuestos y demás insumos que necesita el país puedan cumplir sus funciones, pero parece que sobran para pagar avisos en periódicos del exterior. Tampoco hay dólares para pagar a los acreedores externos que ya están presionando en tribunales internacionales.
La propaganda se puede ver en diarios como El País de Madrid, El Clarín de Buenos Aires, El Nuevo Herald y Diario Las Américas de Miami, además de los servidores de Internet.
El diario español El País recibió muchas críticas porque abrió sus páginas a una columna supuestamente escrita por el presidente venezolano en la que dice cosas que de inmediato fueron refutadas por varios especialistas, pero ese diario español mostró que su compromiso con Nicolás Maduro tiene fuerza al publicar un artículo de un colaborado, descalificando al principal contendor de Maduro en las elecciones del 20 de mayo.
Así la cosas, la campaña electoral quedará cerrada el próximo jueves 17 de mayo y a partir de allí todo dependerá de lo que ocurra el domingo 20 de mayo.