Diputado Armando Armas y la crisis venezolana: Requerimos un nuevo pacto nacional”

 

Por ALFREDO CONDE

*El diputado Armando Armas acaba de ser designado como presidente de Parlamentarios para la Acción Global capítulo Venezuela. Desde ese organismo internacional se enfocará “en difundir la importancia y la eficacia que tiene el Estatuto de Roma para que la Corte Penal Internacional (CPI) conozca todos los casos de crímenes de lesa humanidad” cometidos en Venezuela. Sobre la solución a la grave crisis del país indicó que urge un nuevo pacto nacional”.

Armando Armas, diputado a la Asamblea Nacional por el estado Anzoátegui, en entrevista para Zeta, fue claro al afirmar que Venezuela requiere con urgencia un nuevo pacto nacional para solucionar la grave crisis que atraviesa el país. Afirma que “los países no se acaban. Siempre hay esperanza. Mientras haya voluntad política, ideas, sacrificio, entrega y compromiso ciudadano, siempre habrá salida”.

“El modelo de economía criminal implantado en Venezuela tiene una de sus expresiones más terribles en el denominado Arco Minero, en donde hay poblaciones indígenas esclavizadas por grupos irregulares armados como el Ejército de Liberación Nacional (ELN) de Colombia, que los obliga a trabajar en las minas en condiciones precarias”.

El abogado y legislador por Voluntad Popular, quien es miembro de Comisión Permanente de Ambiente, Recursos Naturales y Cambio Climático,  también habló de las causas que tienen a los venezolanos pasando penurias por la falta de agua potable y en relación al ilegal Arco Minero del Orinoco denunció que “el modelo de economía criminal implantado en Venezuela tiene una de sus expresiones más terribles en el denominado Arco Minero”.

Acción Global capítulo Venezuela

-Comencemos con su designación como presidente de Parlamentarios para la Acción Global capítulo Venezuela. ¿Cuál es la misión fundamental de esta red internacional de legisladores?

-Me siento honrado de asumir esta nueva responsabilidad, la cual viene a sumarse al trabajo que desde la Asamblea Nacional he venido realizando en defensa de los valores esenciales del ser humano. El grupo de Parlamentarios para la Acción Global tiene la importante misión de contribuir  a informar, convocar y movilizar legisladores para promover la libertad, la paz, la democracia, el estado de derecho, los derechos humanos, la igualdad de género y cuestiones poblacionales.

-¿Cómo funciona Parliamentarians for Global Action, (PGA, por sus siglas en inglés)? ¿Cuántos países la agrupan? ¿Qué cantidad de parlamentarios participan? ¿Y cuánto tiempo se mantienen en funciones en representación de sus naciones?

-Es una organización sin fines de lucro y apartidista, integrada por cerca de 1.300 legisladores de 145 parlamentos electos alrededor del mundo. Los miembros de la agrupación permanecen en sus cargos el tiempo que dure su período nacional a menos que pidan su desincorporación de manera expresa. Los que resulten reelectos como diputados mantienen su membrecía.

-¿Cuál es el alcance de lo que en el seno de PGA se determine?

-El grupo se concentra en la adaptación de la legislación interna, sobre todo en materia de leyes internacionales como los tratados emanados en resoluciones de las Naciones Unidas.

-En el caso venezolano, ¿cuáles son las prioridades que piensa enfocar en su gestión y las razones de ello?

-Basados en las campañas internacionales del PGA, en nuestro país nos enfocaremos en difundir la importancia y la eficacia que tiene el Estatuto de Roma para que la Corte Penal Internacional (CPI) conozca todos los casos de crímenes de lesa humanidad que presentamos el pasado mes de octubre en las audiencias públicas de la Organización de Estados Americanos (OEA) con el objetivo de que se sancione a los responsables. También trabajaremos para prevenir la violencia, que lamentablemente se promueve desde el régimen, combatiendo el tráfico ilícito y el contrabando de armas. Paralelamente desarrollaremos iniciativas para luchar contra la discriminación sexual, el abandono infantil, la alta deserción escolar y la preservación del ambiente. Este último en relación al deterioro que presentan las principales reservas acuíferas debido a la contaminación.

-¿Con cuáles comisiones de la Asamblea Nacional y con qué agrupaciones regionales piensa trabajar para atender esa gestión? Lo pregunto con base en la experiencia vivida con la Cumbre de Parlamentarios de Cúcuta del pasado 1° de junio.

-Estamos estableciendo acuerdos con las comisiones permanentes de la Asamblea Nacional de Defensa y Seguridad, Ambiente, Recursos Naturales y Cambio Climático y la de Familia. Así mismo vamos a establecer una sólida alianza con las Organizaciones No Gubernamentales y fundaciones dedicadas a los temas prioritarios para el grupo nacional.

El corredor humanitario

 -Pasemos a otro tema. En abril, en ocasión de la VIII Cumbre de las Américas, usted le entregó a Luis Almagro, Secretario General de la Organización de Estados Americanos (OEA), una propuesta de corredor humanitario para los venezolanos que huyen de la grave crisis que se vive en Venezuela, en especial por la falta de medicinas y alimentos. ¿Qué se ha podido lograr hasta ahora en ese sentido?

-En realidad la propuesta no es mía. Fue una iniciativa de la diputada Gaby Arellano y yo la he estado respaldando. Hasta ahora se ha logrado generar conciencia en los organismos multilaterales, países receptores de migrantes venezolanos y países donantes, en la necesidad de abordar esta crisis de manera articulada. Ya se han anunciado, por ejemplo, recursos financieros para que organismos multilaterales, ONGs y naciones afectadas por el éxodo venezolano puedan atender esta terrible situación. Entre los primeros aportes podemos mencionar los 16 millones de dólares que Estados Unidos otorgó a la Oficina de Naciones Unidas para los Refugiados (Acnur) y a comunidades de refugiados venezolanos en Colombia y Brasil. Así como los 35 millones de euros que la Comisión Europea destinó para la ayuda humanitaria.

La crisis del agua

-Usted es diputado electo a la Asamblea Nacional por el Municipio Guanta del estado Anzoátegui. Es una entidad con muchos problemas, sobre todo en lo referido al tema del agua potable. En realidad es un asunto nacional. ¿Puede presentarnos una radiografía del problema del suministro de agua potable, no solo en Anzoátegui sino en todo el país? ¿Cuáles son las causas por las que los venezolanos pasan calamidades por la falta de este recurso?

-Yo fui electo diputado del circuito 4 del estado Anzoátegui, integrado por los municipios Urbaneja, Sotillo y Guanta, todos con gravísimos problemas de suministro de agua potable, que se han visto acentuados en los dos últimos años debido principalmente al déficit de producción de agua en la zona norte de la entidad. Esto obedece a la falta de inversión por parte de los organismos del Estado en todo el territorio nacional.

El 5 de agosto de 2016, en compañía de un grupo de vecinos, solicitamos respuesta ante la Hidrológica del Caribe (Hidrocaribe), la Defensoría del Pueblo, Alcaldía de Guanta y el Consejo Legislativo de Anzoátegui, pero ninguno se abocó a dar solución. La discriminación política, que es una orientación clave del desempeño del régimen, también ha jugado un papel determinante en este caso, pues tenemos denuncias de habitantes de algunos sectores de Guanta como Los Cocalitos, La Picha, Volcadero y Las Palmas, a quienes los han dejado por largo tiempo sin suministro agua. Esto ocurre también con los servicios de agua y luz, así como con la asignación de recursos en aquellos estados gobernados por factores distintos a la dictadura. Vale recordar lo que dijo el actual presidente de la fraudulenta Constituyente, Diosdado Cabello, cuando señaló que “¿quién los manda a no votar por Maduro?”.

-Insistimos en que la solución definitiva a este problema es la construcción de un nuevo acueducto o la toma del río Neverí, proyecto presentado por el Colegio de Ingenieros de Anzoátegui. Con esta obra se aumentaría en más de 50% la capacidad de producción del canal de Caratal, nuestra principal fuente de suministro de agua, cuya capacidad es de 6.300 litros de agua por segundo, pero sólo genera 2.500 lt/seg. La idea es llegar a los 9.000 litros por segundo para cubrir la demanda de la zona norte.

El Arco Minero

 -En Zeta hemos reflejado con mucho interés lo que sucede en el llamado Arco Minero del Orinoco, no solo en la explotación ilegal de minerales, sino en el daño ecológico que allí se ha denunciado y el perjuicio que se le ha ocasionado a las comunidades indígenas. ¿Hay forma de parar eso? ¿A través de Parlamentarios para la Acción Global, cree que algo se puede lograr en este aspecto?

-Bueno –prosigue el diputado Armas-, en las condiciones en que se encuentra actualmente el Parlamento venezolano es difícil parar el ecocidio que se desarrolla en el Arco Minero, pero detener ese proyecto criminal del régimen tiene que ser una prioridad del país entero. Para acabar con esa práctica ilegal, hay que salir de Maduro y su pandilla. El modelo de economía criminal implantado en Venezuela tiene una de sus expresiones más terribles en el denominado Arco Minero, en donde hay poblaciones indígenas esclavizadas por grupos irregulares armados como el Ejército de Liberación Nacional (ELN) de Colombia, que los obliga a trabajar en las minas en condiciones precarias. Detrás de todo eso lo que hay son intereses económicos oscuros que involucran a personeros del régimen y oficiales militares que siendo minoría, enlodan el nombre de la institución a la que pertenecen y hacen que en la mayoría de los venezolanos crezca un sentimiento de animadversión al estamento castrense. Esto hay que detenerlo porque la institución militar debe ser un pilar fundamental para la República.

-Desde Parlamentarios para la Acción Global –sentencia Armas- acompañaremos a nuestros colegas diputados Américo De Grazia en esa lucha titánica que mantiene por evitar que se siga imponiendo la irracionalidad y explotación desmedida de esa zona, así como también al presidente del Parlamento Amazónico y miembro del PGA, Ramón Flores Carrillo.

-Recuerdo que en las décadas de los ’80 y ’90 en lo que era el Ministerio del Ambiente y de los Recursos Naturales Renovables (MARNR) había una dirección de Educación Ambiental. ¿Qué queda de eso?

-Realmente no creo que exista. Lamentablemente toda esa tradición de defensa del ambiente que se forjó a lo largo de muchas décadas en Venezuela, ha sido destruida como casi toda la infraestructura física e institucional del país. Nosotros fuimos pioneros a escala internacional con la creación del Ministerio del Ambiente, que reflejaba la preocupación de los venezolanos por un desarrollo sustentable, que hoy en día está en total ruina.

La solución a la crisis venezolana

-Por último, haciendo un breve análisis de la situación que les ha tocado vivir a los venezolanos en los últimos 20 años, ¿cuál cree usted fue la razón que desencadenó el panorama político, económico, social, moral e institucional que hoy tenemos y más importante cuál es la solución?

-A este punto llegamos por no cuidar ni perfeccionar nuestro sistema democrático. La democracia y sus instituciones son una obra constante que no podemos descuidar y eso se hizo. La crisis económica de los 80’s y la debilidad de nuestras instituciones fueron el mejor caldo de cultivo para que llegado el momento de las reformas necesarias, los oportunistas lograran meterse en la casa de la democracia y desmantelarla desde adentro, pues la sociedad no estaba consciente ni preparada para asumir la transformación.

“Es necesario buscar la inclusión, lo positivo, lo que hace grande a nuestro gentilicio. Un gran consenso nacional sobre el nuevo lenguaje, una nueva narrativa nacional. Desintoxicarnos del odio inoculado estos años, antes por Chávez y ahora por Maduro”.

-Luego de 20 años –continúa- vemos que todos los indicadores políticos, económicos y sociales han tenido una caída estrepitosa. No hay ni un solo parámetro de desarrollo que refleje algún tipo de progreso en Venezuela. Hemos sufrido una involución a todo nivel. Los vicios superados por el período democrático reaparecieron y las imperfecciones como la corrupción, la delincuencia, el hambre y la falta de oportunidades se han exacerbado a niveles de una situación solo comparable a países devastados por la guerra.

-Pero los países no se acaban –dice con firmeza-, pues siempre hay esperanza. Mientras haya voluntad política, ideas, sacrificio, entrega y compromiso ciudadano, siempre habrá salida. Contamos con muchísimo talento para lograr que Venezuela siga adelante. Hay historias de éxito, de emprendimiento, de excelencia a todos los niveles dentro y fuera de nuestras fronteras. Requerimos un nuevo pacto nacional. Tenemos a mi parecer 3 desafíos en este momento. El primero es definir un liderazgo en los factores que adversamos al régimen y que representamos a la gran mayoría de la población. El segundo es consensuar y firmar un compromiso para una transición, el cual debe tener en su núcleo el cumplimiento de ciertas metas en función del desarrollo nacional. Entonces es un tema de metas, no de lapsos. En ese pacto debe estar reflejado, por ejemplo, el tiempo en el que vamos a disminuir la mortalidad infantil, la desnutrición, el índice de escolaridad, el incremento del producto interno bruto y la reducción de la desigualdad. Esto se puede evaluar año a año.

-En lo político –añade el diputado de Anzoátegui-, deberíamos tener un nuevo marco constitucional que nos permita transcender el sistema presidencialista como está consagrado actualmente, tener doble vuelta electoral, iniciar un proceso de Federalización del Estado y además una reforma militar que busque la formación y meritocracia.

-En tercer lugar y no menos importante, debemos reconstruir el alma de nuestro país. Dejar de un lado el odio, el revanchismo y el rencor. Es necesario buscar la inclusión, lo positivo, lo que hace grande a nuestro gentilicio. Un gran consenso nacional sobre el nuevo lenguaje, una nueva narrativa nacional. Desintoxicarnos del odio inoculado estos años, antes por Chávez y ahora por Maduro.

Tenemos una crisis de Estado inédita en la historia contemporánea del hemisferio, por ende las soluciones requieren de estadistas que tengan la capacidad de innovar.

Twitter: @Alconde