Por.-Alex Vallenilla / @alexvallenilla
-Luego del fracaso con los “precios justos”, Maduro ahora ensayará algo llamado los “precios acordados”
El caos económico en Venezuela no tiene control, la administración Maduro cada vez se ve más encerrada ante el colapso general que se está desarrollando debido a los efectos de la peor hiperinflación históricamente registrada en América Latina. Durante dos semanas se han desatado decenas de protestas de distintos sectores, las enfermeras, que mostraban sus zapatos rotos a la prensa y que le aclaraban al Ejecutivo que era imposible incluso lavar los uniformes porque el salario de un mes no alcanza para comprar una bolsa de detergente, han estado en la calle con un paro nacional, al que se han sumado los bioanalistas y este miércoles se sumaban los médicos.
Al mismo tiempo los profesores universitarios de todas las principales casas de estudio elevaron su voz de reclamo y pararon sus actividades, a ellos se han sumado los empleados y obreros de estas instituciones y es que mientras a los militares, según denuncias del diputado de la Asamblea Nacional (AN) José Olivares, el gobierno les prepara sendos aumentos de sueldos, el resto del personal público no pude cubrir ni 1% de la canasta alimentaria familiar (CAF).
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El sector de transporte público, que está hundido en la paralización de casi 90% de las unidades, no logra reponerse a pesar de que exige aplicar aumentos del pasaje en 20 bolívares, lo que se llevaría más de 35% del salario mínimo de un trabajador, pero el problema más grave es que los venezolanos no logran conseguir dinero en efectivo para realizar el pago en las unidades colectivas. Esta situación se suma a la estampida de trabajadores públicos que dejan a diario sus puestos abandonados, en vista de que los salarios no alcanzan, ahora es prácticamente imposible llegar a cumplir con la jornada laboral.
El gobierno de Nicolás Maduro continúa emitiendo dinero de manera exagerada, en el último mes la liquidez monetaria subió a 1.645 billones de bolívares, avanzando 44,66% en el último mes, acumulando una agresiva subida de 7.220,38% en el último año, siendo esto el principal combustible de la hiperinflación, estimada en 43.000% según el Índice Café Con Leche que publica Bloomberg, el cual le hace seguimiento al precio de una taza de café servido en las panaderías de Caracas y que ya superó el precio de 1 millón de bolívares.
La hiperinflación ha derivado en una destrucción del valor del trabajo de los venezolanos, ya que los sueldos son irrisorios ante el avance de los precios lo que hace insostenible la vida civil en este país, actualmente una comisión estatal se dispone a publicar una lista de unos 15 productos con “precios acordados”, luego que se fracasara con los “precios justos”.