Por.- Alex Vallenilla / @alexvallenilla
-Debido a la alta emisión de dinero que mantiene el gobierno, el dólar se disparó, lo que hizo caer el valor de los ingresos de trabajadores
Al cierre de junio de este año, el salario mínimo “integral” (SMI) que se compone del valor del sueldo y el bono alimenticio, conocido comúnmente como “cesta ticket”, cayó a un récord mínimo, al desplomarse hasta 0,75 dólares al mes. Esa marca sólo permitía dar cobertura a la canasta alimentaria familiar (CAF) de apenas 0,26%. Cae así, desde 1,52 dólares al mes, que se ganaba en mayo. En junio el SMI era de 2.555.000 bolívares y el dólar en los mercados no autorizados cerró en 3.405.751,03 bolívares.
Se desploma en un año, 97,31% el valor del SMI, lo que es equivalente a haberlo eliminado, al compararse con el alza de precios de bienes y servicios, incluyendo los productos básicos alimenticios y de salud. A través de la hiperinflación que genera el Banco Central de Venezuela (BCV), con la excesiva emisión de dinero en el sistema monetario, que el gobierno emplea para cubrir el déficit estatal, queda prácticamente confiscado el salario en Venezuela, ya que según algunos teóricos de la economía, la inflación es una especie de impuesto que aplica el Estado.
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El derrumbe de los ingresos de los venezolanos se produce debido a la excesiva oferta monetaria que mantiene el banco central, además de la escasez de bienes y servicios por la imposibilidad de invertir en Venezuela y que el gobierno permita reglas económicas libres, esto ha reducido la capacidad de producir internamente en menos de 20%, situación que ha derivado en una ola de protestas iniciadas por trabajadores del sector salud, que muestran en redes sociales fotos de sus zapatos rotos como muestra de la situación, se les ha sumado profesionales universitarios, de empresas públicas como la de la electricidad, cementeras, la telefónica nacional Cantv, pensionados y jubilados petroleros.
El gobierno mantiene una fuerte emisión de dinero para sostener operaciones del sector público ya que el Seniat no tiene capacidad de generar los ingresos necesarios por la vía tributaria, la industria petrolera no hace los aportes en la cantidad que se requiere por la crisis que atraviesa, además debe sostener a pensionados y los bonos que emite a través del carné de la patria.