*** Líderes suecos aseguran que el ingreso a la OTAN es la mejor opción para la seguridad de Suecia, mientras Putin muestra desdén con la movida.
Por José Piñeiro
La primera ministra sueca, Magdalena Andersson y el líder de la oposición, Ulf Kristersson, anunciaron formalmente que Suecia solicitará el ingreso en la OTAN. “Hay una clara mayoría parlamentaria que respalda la adhesión”, dijo Andersson. “Es la mejor opción para la seguridad de Suecia”.
El dictador ruso Vladimir Putin dijo, por su parte, que Rusia no considera que la adhesión de Finlandia y de Suecia a la OTAN amenace su régimen, pero que Moscú va a reaccionar si hay un despliegue de infraestructura militar.
«Pero la expansión de infraestructura militar hacia estos territorios por supuesto va a generar ciertamente una reacción como respuesta», advirtió.
«Esto es un problema que se crea completamente artificialmente porque se hace en interés de Estados Unidos», aseguró Putin que agregó que la OTAN se convirtió «en el instrumento de política exterior un solo país».
Por su parte Kristersson dijo que “a Rusia no le va a gustar que Suecia y Finlandia entren en la OTAN. Tenemos que estar preparados para unos meses complicados”.
La mandataria socialdemócrata aclaró que distintos miembros de la Alianza -“EE UU, el Reino Unido, Francia y Alemania”- ofrecieron garantías de que protegerán a Suecia durante los meses que tarde en ratificarse la adhesión.
El anuncio de los líderes de las dos principales fuerzas parlamentarias en el país escandinavo llega horas después de celebrarse un debate parlamentario en el que las únicas formaciones que han mantenido su postura contraria al ingreso a la Alianza han sido La Izquierda y el Partido Verde, que suman solo 43 de los 349 escaños.
Y un día después de que Finlandia -país con el que Suecia ha mantenido una estrechísima cooperación en materia militar durante el último decenio- anunciara también formalmente su intención de ingresar al bloque militar.
La mandataria sueca reconoció que la decisión final de Estocolmo estuvo “profundamente influenciada” por los acontecimientos en Helsinki. Andersson dijo que si Suecia se convirtiese en el único país del mar Báltico que no pertenece a la Alianza Atlántica, se encontraría “en una posición muy vulnerable”, mencionando el riesgo de que Rusia “aumentara la presión” sobre el país escandinavo.
La primera ministra anunció que el embajador de Suecia ante la OTAN entregará “durante los próximos días” la solicitud formal de adhesión en la sede de la Alianza en Bruselas, agregando que se presentará simultáneamente con la de Finlandia.
Andersson y otros líderes dijeron que pedirán en su solicitud de adhesión a la OTAN que se excluya la posibilidad de desplegar armamento nuclear o la instalación de bases permanentes con tropas aliadas en territorio sueco.