La empresa busca transformar la vida de personas con parálisis a través de la revolucionaria interfaz cerebro-computadora.
Elon Musk, el polémico fundador de Tesla y X, ha dado un nuevo paso adelante en su visión de un futuro cibernético. Neuralink, la empresa dirigida por Musk que se especializa en desarrollar implantes cerebrales, ha obtenido la aprobación de un comité de revisión independiente para iniciar su primer ensayo en humanos.
Este primer ensayo clínico tiene como objetivo evaluar la seguridad y eficacia de una interfaz cerebro-computadora implantable e inalámbrica diseñada para permitir a las personas con parálisis controlar dispositivos externos simplemente utilizando su pensamiento. Los individuos que pueden participar en el estudio son aquellos afectados por lesiones en la médula espinal cervical o esclerosis lateral amiotrófica (ELA).
El multimillonario no ocultó su entusiasmo al compartir la noticia a través de su cuenta de X (anteriormente conocida como Twitter), donde escribió: “Pronto, el primer paciente humano recibirá un dispositivo de Neuralink. Esto tiene el potencial de restaurar completamente el movimiento del cuerpo […] Imagina si Stephen Hawking hubiera tenido esto.”
Stephen Hawking y la ELA
La mención de Hawking no es una casualidad, ya que el renombrado físico vivió con ELA, una enfermedad que afecta las neuronas motoras del cerebro y la médula espinal, llevando a una pérdida progresiva de las habilidades motoras. Diagnosticado a los 21 años, Hawking desafió todas las estadísticas al vivir con la enfermedad durante más de 55 años; una hazaña que asombró a los neurólogos dada la esperanza de vida promedio de 14 meses después del diagnóstico.
Durante su vida, Hawking tuvo que adaptarse a una serie de complicaciones derivadas de la ELA, incluida la dificultad para tragar y eventualmente la pérdida de la capacidad de hablar. Pese a las barreras físicas, su mente continuó explorando los confines del universo, comunicándose a través de un sistema electrónico y luego mediante el movimiento de un músculo bajo su ojo.
Un futuro con Neuralink
El implante cerebral de Neuralink representa una chispa de esperanza para muchos, con la promesa de restaurar la movilidad y quizás incluso ofrecer una conexión más rica y profunda entre los humanos y la inteligencia artificial.
Mientras el mundo observa con expectación, Musk y su equipo se preparan para embarcarse en una prueba que podría cambiar las reglas del juego en el tratamiento de enfermedades neurodegenerativas y potencialmente redefinir lo que significa ser humano en una era cada vez más digital.
A medida que se acerca el Día Mundial Contra la ELA el 21 de junio, este avance pone de manifiesto la urgencia de invertir en investigación y desarrollo para combatir esta enfermedad y ofrecer una nueva oportunidad a quienes la padecen.
Los ojos del mundo están puestos en Neuralink, esperando ver si la visión futurista de Musk puede convertirse en una realidad tangible que transforme las vidas de miles de personas alrededor del mundo.