Jesús González de Zárate

La Iglesia venezolana observa con esperanza los recientes acuerdos en Barbados

La Conferencia Episcopal Venezolana expresó su optimismo respecto al diálogo entre el gobierno y la oposición.

Jesús González de Zárate, presidente de la Conferencia Episcopal Venezolana (CEV), ofreció sus reflexiones este jueves sobre los recientes acuerdos alcanzados entre la administración de Nicolás Maduro y la Plataforma Unitaria de la oposición. Estos diálogos, realizados en Barbados, culminaron en consensos que, según González de Zárate, representan «primeros signos» hacia una solución a la prolongada crisis política en Venezuela.

“Todos esperamos que haya voluntad de las partes y coherencia en el seguimiento de las decisiones”, expresó González de Zárate en una entrevista con Unión Radio. Sus palabras reflejan una mezcla de optimismo cauteloso y una insistencia en la necesidad de acciones concretas que respalden las palabras plasmadas en los acuerdos.

La Iglesia ha estado observando de cerca el desarrollo del diálogo, poniendo especial atención en temas sensibles como la liberación de los presos políticos. González de Zárate subrayó la necesidad de atender estos asuntos con eficacia y transparencia.

Los acuerdos firmados el pasado 17 de octubre marcan un punto de inflexión potencial en la relación entre el gobierno y la oposición. Los documentos se centran en los «derechos políticos y garantías electorales» e «intereses vitales de la nación», y se vislumbran como un paso hacia la restauración de la normalidad democrática en el país sudamericano.

El proceso de diálogo, que se retomó después de estar en pausa desde noviembre de 2022, ha llevado a compromisos para la celebración de elecciones presidenciales en el segundo semestre de 2024. Este evento electoral contará con actualizaciones en el Registro Electoral y observación internacional para asegurar un proceso justo y transparente.

Mientras Venezuela avanza en este delicado proceso, la vigilancia de la Iglesia y de otros actores civiles será crucial para garantizar que las promesas se traduzcan en acciones tangibles que beneficien al pueblo venezolano. La esperanza se mantiene, pero está íntimamente ligada a la expectativa de responsabilidad y coherencia por parte de ambos bandos del espectro político.