En medio de las crecientes tensiones en Medio Oriente, el secretario de Estado estadounidense se reúne con su homólogo turco para abordar la crisis en Gaza y las deterioradas relaciones turco-israelíes.
La visita a Turquía del secretario de Estado de EE.UU., Antony Blinken, se produce en un momento de alta tensión diplomática debido al conflicto en Gaza y la postura de Turquía contra los ataques de represalia de Israel. Blinken, quien se reunirá con el ministro de Exteriores turco, Hakan Fidan, encontrará un panorama complejo con posiciones más divergentes que nunca respecto al conflicto palestino.
El presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, ha intensificado su retórica contra Israel, negando la validez de Netanyahu como interlocutor y rechazando cualquier negociación con Hamás, mientras Blinken ha descartado un alto el fuego tras reunirse con representantes de seis países árabes en Amán.
Las relaciones bilaterales entre Israel y Turquía, que se estaban recuperando, han vuelto a tensarse con la retirada de embajadores. La crisis afecta también a las relaciones turco-estadounidenses, ya que Turquía responsabiliza en parte a Washington por el apoyo a Israel.
El analista turco Oytun Orhan sugiere que durante su encuentro, Fidan presionará a Blinken para que Estados Unidos reduzca su respaldo a Netanyahu y contribuya a frenar la invasión terrestre de Gaza y a facilitar la intervención humanitaria. Blinken, por su parte, intentará convencer a Turquía de atenuar su postura contra Israel para no obstruir la potencial recuperación de las relaciones post-conflicto.
Las anteriores crisis entre Turquía e Israel, incluyendo la del Mavi Marmara y el traslado de la embajada estadounidense a Jerusalén, demuestran un patrón de altibajos diplomáticos, que se ha exacerbado recientemente con los ataques de Hamás y la consecuente respuesta israelí.
Erdogan ha defendido a Hamás como «luchadores por la libertad», a pesar de su clasificación como grupo terrorista por Estados Unidos y la Unión Europea, y ha condenado lo que considera una masacre en Gaza. Este complejo escenario diplomático y las divergencias en las políticas exteriores de Turquía y Estados Unidos serán el telón de fondo para las conversaciones cruciales entre Blinken y Fidan.